Marchamalo entra en las bibliotecas de escritores en 'Los reinos de papel': "¿Quién dice que los escritores no leen?"

Marchamalo entra en las bibliotecas de escritores en 'Los reinos de papel': "¿Quién dice que los escritores no leen?"
Marchamalo entra en las bibliotecas de escritores en 'Los reinos de papel': "¿Quién dice que los escritores no leen?"
EUROPA PRESS
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"Eso no es verdad, o por lo menos lo que yo me he encontrado. ¿Quién puede decir que los escritores no leen? Para mí, hay una relación indisociable entre la creación, la novela y la lectura", ha señalado en una entrevista con Europa Press el autor.

Durante más de dos años y medio, Marchamalo emprendió un proyecto de visitar las bibliotecas de determinados autores españoles y, además, charlar con cada uno de ellos en bibliotecas públicas. De esta manera, el periodista retomaba sus trabajos ya publicados iniciados en el año 2007 bajo el título de 'Bibliotecas de autor'.

El resultado son una veintena de artículos en los que Marchamalo describe espacios que, en la mayoría de los casos, no se tratan de "bibliotecas epatantes". "Muchas veces cuando les proponía hacer una visita me advertían: 'Pero es que mi biblioteca es normal'. Y es verdad, son bibliotecas de lectores", ha afirmado.

Julio Llamazares, Vicente Molina Foix, Marta Sanz, Bernardo Atxaga o Javier Gomá son algunos de los nombres de propietarios de bibliotecas que le han abierto la puerta a Marchamalo. "Me gusta indagar en las bibliotecas de los demás porque creo que es la mejor manera de conocer a alguien", ha aseverado.

Para elegir a los autores, el periodista no ha seguido una guía "casual y caprichosa", sino que en varias ocasiones dependía de la disponibilidad de los escritores para participar en las charlas. Además, ha habido otro punto que ha intentado "corregir" y ha sido el de la "asimetría" en la cifra de mujeres escritoras que aparecen en el libro --Marta Sanz, Ángeles Caso, Rosa Montero y Elvira Lindo--.

Marchamalo no cree que en este ofrecimiento de mostrar la biblioteca propia haya "un punto de exhibicionismo", sino que se trata de "todo lo contrario". "Es un espacio secreto para muchos, que no está a la vista de las visitas, y por eso es algo que tiene que ver con su mundo privado", ha destacado.

BIBLIOTECAS FALSIFICADAS

Asimismo, tampoco cree que se trate de lugares "impostados". "Son bibliotecas muy vividas. No es fácil falsificar una biblioteca para mostrarla, porque exige dedicación, trabajo y acumulación de años y es fácil percibir cuando estás en una biblioteca falsa, donde el adorno son los libros", ha apuntado.

El autor ha destacado algunas bibliotecas que le han llamado la atención, como el caso de Molina Foix, que tiene una casa expresamente dedicado a ello, o la de Luis Antonio de Villena. "Es excepcional, cuando la visitó el poeta Leopoldo Alas llegó a decir que tuvo la sensación de poder encontrar todo, cualquier libro que quisiera", ha destacado.

Para Marchamalo "quedan muchísimas bibliotecas por conocer" y ha adelantado que ya está inmerso en un proyecto nuevo para seguir dando a conocer estos espacios. El periodista ha reconocido que, en su caso, cuenta con una "biblioteca normal de lector" y con un cierto "gusto por los libros dedicados.

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