El arte contemporáneo y 17 dibujos inéditos de Picabia brillan en el Pompidou

María Luisa Gaspar.

París, 30 jun.- El verano en el Centro Pompidou de París pasará por tres exposiciones inauguradas hoy en su cuarta planta, la de su Museo de Arte Moderno (MNAM), donde descubrir una historia del arte actual desde los años 80; la muestra "Magiciens de la Terre", 25 años después; y una serie inédita de dibujos de Francis Picabia.

Tres muestras muy diferentes y complementarias a la vez, ya que, aparte de enfocar al arte más contemporáneo y global, descubren el final del movimiento dadaísta y el inicio del surrealismo desde un ángulo novedoso.

Este último fue el enfoque elegido en la exposición "Man Ray, Picabia y la revista Litérature (1922-1924)", que hasta el 8 de septiembre en la Galería de Arte Gráfico del MNAM reúne el trabajo de los dos artistas pioneros, ambos grandes colaboradores de esa publicación, que terminaría dirigiendo en solitario André Breton.

Reúne en total cerca de 150 obras, algunas de gran formato o tan célebres como el "Violon d'Ingres" de Man Ray, pero ante todo presenta por primera vez 17 dibujos inéditos de Picabia, un "conjunto excepcional y rarísimo", destacan sus comisarios, Clément Chéroux y Christian Briend.

De dimensiones mucho mayores, la exhibición "Una historia, Arte, Arquitectura, Diseño, de los años 80 a nuestros días", que cambiará el rostro del Museo Nacional de Arte Moderno del Centro Pompidou (MNAM) durante los próximos seis meses, presenta sus fondos contemporáneos desde una nueva perspectiva.

Es una selección de 400 obras de alrededor de 200 artistas de todo el mundo, escogidas "a partir del artista como historiador, explorador o investigador", dijo a Efe el director del museo, Bernard Blistène.

Los fondos, recordó, vienen de "una de las colecciones más importantes de arte moderno y contemporáneo del mundo", que posee 110.000 obras y que es amplificada y renovada sin cesar. Se ha creído indispensable mostrar su estado actual "no desde un enfoque puramente histórico o cronológico, sino temático y más analítico".

De la tercera exhibición, subrayó que, antes de que el Pompidou organizase en 1989 "Magiciens de la Terre", los museos centraban su visión del arte todavía esencialmente en Europa, y el debate lo era "sobre todo entre culturas europeas y estadounidenses".

"Con su generosidad, con sus torpezas quizás también", apuntó, esa muestra abrió otra vía para "repensar el territorio o los territorios de la creación, más allá de esa oposición".

Resaltó que es una "première", porque es "una exposición sobre una exposición", la organizada en los albores de una globalización todavía no reconocida entonces aún como tal y que hoy aparece como uno de los momentos fundadores del proceso de globalización del arte contemporáneo.

"Magiciens de la Terre. Retour sur une exposition légendaire" (Magos de la Tierra. Retorno sobre una exposición legendaria) reabre de hecho el debate inaugurado hace 25 años con aquel primer evento, que reunió por primera vez a 101 artistas vivos de los cinco continentes y que, según el Pompidou, "revolucionó la escena artística internacional del siglo XX".

El homenaje prolonga dicha reflexión mediante esta exposición documental con vídeos, documentos y fotografías; con una universidad de verano del 1 al 10 de julio; y con una nueva publicación sobre el tema.

El comisario de la muestra de 1989, Jean-Hubert Martin, destacó, por su parte, que "hay que dejar de funcionar con categorías elaboradas en el siglo XIX y en un sistema colonial", como todavía sigue ocurriendo en gran medida, "y pensar de una vez por todas en términos de humanidad y de comunicación sobre el planeta entero".

"Hace 25 años tuvimos que hacer una enorme investigación en busca de artistas del mundo entero", dijo Martin, antes de asegurar que hasta entonces "las exposiciones solo mostraban artistas de Europa del Oeste y de América del Norte, a veces algunos del sur, pero el resto era ignorado".