El director de la película 'Callback', Carles Torras, ha destacado que el filme, que llegará este viernes a los cines españoles, muestra "un 'loser' que pretende ser un 'winner', en una visión sarcástica y cáustica de los tópicos de la cultura americana y los comportamientos de los estadounidenses", ha dicho en una entrevista a Europa Press.
La película, que se estrena un año después de ganar la Biznaga de Oro a mejor película del festival de Málaga, es un 'thriller' psicológico con puntos de comedia negra, protagonizado por un inmigrante en Nueva York que trabaja como transportista mientras hace castings para ser actor de anuncios de radio.
Tiene muchos tintes autobiográficos del actor protagonista, el chileno Martín Bacigalupo, que a su vez es guionista junto al director: "Me puedo sentir identificado por ser inmigrante en Nueva York, pero también por querer ser actor cuando el oficio está industrializado. Llegué a sentirme como un imbécil haciendo anuncios de agencias de viaje pensando que luego me vendría algo mejor", ha explicado Bacigalupo.
JUEGO DE APARIENCIAS
El personaje protagoniza "un juego de apariencias: vive fascinado por la cultura americana y siendo alguien de fuera finge ser el más americano de todos, y a la vez dice que es actor, pero en realidad es un transportista", ha asegurado el director.
Este intento de mostrarse americano acaba reflejando todos los "tópicos del nacionalismo blanco americano, con mucho 'branding', que aunque parezca mentira son muy reales", ha añadido el director, según quien es un nacionalismo muy propio del país y que no se puede extrapolar ni a Catalunya ni España.
Se trata de una producción catalana, aunque está ambientada en Nueva York y rodada prácticamente toda allí, con actores americanos y en versión original inglesa.
FRICCIONES ENTRE 'LOSERS' Y 'WINNERS'
Carles Torras decidió centrarse en EE.UU., y especialmente Nueva York: "Me impactaron las contradicciones de la ciudad. A diferencia de otras donde todo el mundo va en coche, hay mucho más contacto y, con ello, fricciones entre 'losers' y 'winners', alimentando sueños y frustraciones. Esto ayuda a la hostilidad del entorno", ha reflexionado el director.
Él mismo asegura que esta producción catalana tiene "vocación internacional total", tanto para Europa --ha ganado el premio del Festival de Cine de Bruselas-- pero también de consumo interno para los americanos, a pesar de la imagen que da de su sociedad, donde esperan poder estrenarla en el futuro.
Lo cree también el actor Timothy Gibbs, que hace el papel de un cura evangélico a quien el protagonista visita: "Los norteamericanos siempre estamos buscando 'thrillers' no convencionales. Este tiene una doble calidad: es diferente, nunca vi algo como eso, con una historia original y sorprendente; y a la vez usa la sensación de suspense muy bien, algo nada fácil", ha detallado el actor.
La película se estrena este viernes en España, mayoritariamente en los cines que suelen proyectar en versión original; en Catalunya será en los Verdi y Boliche de Barcelona, los Truffaut de Girona, y la semana que viene también en el Espai Funàtic de Lleida.
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