El director ha precisado que sus motivos no coinciden con los de Antonio Resines y Edmon Roch para abandonar la presidencia y la vicepresidencia de la institución, respectivamente, aunque ha admitido que la Academia tiene un "problema muy serio en la organización": "El nulo poder del presidente".
"No es posible que el presidente pueda ser vigilado por la Junta de una manera tan potente, porque está atado de pies y manos", ha señalado Martínez-Lázaro, quien ha señalado que hay quien quiere "fiscalizar" el día a día.
El cineasta ha admitido que en la Academia ha habido cierto "lío", en referencia a la renovación del contrato del director general, Porfirio Enríquez, que necesitaba un "preaviso" y, en caso contrario, se renovaba "automáticamente". Según ha relatado, la Junta decidió despedir al director general pero cuando vio que la cláusula por despido era "muy fuerte" decidió rectificar en su decisión.
En este sentido, el cineasta ha admitido su tristeza y ha indicado que "la Academia no ha de estar metida en estos embrollos", y ha confesado que en cierto modo eso también le ha animado a irse. "He visto un juego de niños, algo infantil", ha criticado.
Preguntado por las posibles candidaturas a la presidencia, Martínez-Lázaro ha señalado que "va a ser difícil" que haya un candidato que guste a todos.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios