No queriendo hurgar en la herida, los atentados del 11 de septiembre tardaron varios años llegar al cine a bombo y platillo. Primero había que asimilar lo ocurrido, digerirlo. Una década después de aquellos ataques en los que murieron cerca de 3.000 personas, aún siguen siendo solo unas pocas las películas que han retratado el horror que se vivió entonces. Más son, por el contrario, las que han utilizado la Guerra de Irak como telón de fondo. Ahora le toca el turno a Bin Laden. Su muerte ha abierto la veda para que el cine cuente su historia con un final cerrado. La mejor situada para dar el pistoletazo de salida, la oscarizada Kathryn Bigelow.
La secuencia de cómo se llevó a cabo el asalto al fortín en el que se escondía Osama Bin Laden y de cómo se terminó con él parece sacada de cualquier título de acción. Por eso no es de extrañar que Hollywood haya volado para aprovechar el tirón y convertir la noticia en material para una película. Dicen que la mejor colocada para hacerlo es Kathryn Bigelow. La directora ya sabe lo que es centrarse en la guerra y en sus consecuencias. Sorprendió a todos en la gala de los Oscar de hace un año colocando a su 'Tierra hostil' como la ganadora de la noche.
En realidad, Bigelow ya estaba trabajando en un nuevo proyecto en el que tenía previsto contar una operación fallida de captura del enemigo público número uno de los Estados Unidos. Sin embargo, los recientes acontecimientos han hecho que tenga que revisar el guión y cambiarle el final. ¿Para qué contar una operación fallida si al final hubo una con éxito? Por suerte para ellos, aún tienen margen suficiente para hacer las pertinentes modificaciones. Así lo ha reconocido el guionista Mark Boal, inmerso en el proyecto, a la revista 'Variety'. Además, avisa de que habrá una escena de cuarenta minutos que reflejará la operación de captura y muerte del terrorista.
Otro de los proyectos de los que se habla y que podría aprovechar el tirón de actualidad de la muerte de Bin Laden es la adaptación del libro 'Jawbreaker'. En él, un agente de inteligencia cuenta una operación realizada en 2001 en la que casi dan caza al considerado máximo responsable de los atentados del 11 de septiembre contra las Torres Gemelas y el Pentágono. Podría recibir ahora luz verde tras la muerte del líder de Al Qaeda, aunque con modificaciones en el final. Se habla de estas dos, pero seguramente habrá más. Hollywood no va a desaprovechar la oportunidad.
El 11-S visto por el cine
Las Torres Gemelas viniéndose abajo. El avión impactando contra la segunda torre. Gente lanzándose al vacío. Polvo. Gritos. Ataques de pánico. Escombros. Las imágenes de los atentados del 11 de septiembre se han grabado a fuego en la retina de varias generaciones. Parecían sacadas de una película 'made in Hollywood'. Sin embargo, eran reales. Cerca de 3000 personas murieron en aquellos atentados perpetrados por Al Qaeda contra el World Trade Center de Nueva York y contra el Pentágono. El horror de aquel día marcó a la sociedad americana en muchos aspectos y el cine no escapó a sus efectos.
Durante años, los hechos de 11S fueron un tema tabú para el cine. Pese al potencial dramático con el que contaban, nadie se atrevía a reflejarlos en un guión. No son muchas las películas que se han centrado en la tragedia de hace una década. Hubo un par de tímidos intentos que pasaron prácticamente inadvertidos para el gran público en 2002. Aquel año se estrenaron '11'09''01 September 11' y 'The Guys'. La primera estaba compuesta de una serie de cortos en la que varias personas contaban en 11 minutos y nueve segundos como vivieron los ataques. En la segunda el eje central de la trama era un capitán de bomberos que se enfrenta a la pérdida de sus hombres en el derrumbe de las Torres.
Uno de los estrenos más sonados tuvo lugar ya en 2004, cuando Michael Moore abordó los hechos, causas y consecuencias con su particular estilo de ver y contar las cosas en el documental 'Fahrenheit 9/11'. Otro documentalista que decidió abordar el tema fue Morgan Spurlock. El que fuera responsable de 'Super Size Me' intentó una vez más sorprender con un documental en el que se plantaba en Afganistán para encontrar a Bin Laden. El cartel con él montado en un camello y ataviado con un turbante lo dice todo. Se llamó 'Where in the World Is Osama Bin Laden'.
El efectismo y la espectacularidad llegaron en 2006 con la esperada 'World Trade Center'. A los mandos, Oliver Stone. En el cartel, Nicolas Cage. Esta se centró en dos bomberos que quedaron sepultados bajo los escombros y su agónica lucha por sobrevivir. Ese mismo año Paul Greengrass estrenó 'United 93'. El director de la saga Bourne prefirió contar qué ocurrió con el cuarto avión. Ese que no cumplió su misión de estrellarse contra la Casa Blanca. Desde Europa llegó 'Algunos días de septiembre', en la que un agente de la CIA era el protagonista. Ficción era también 'Remember Me', una historia de un chico problemático y torturado que encuentra su camino demasiado tarde. Un final efectista con Robert Pattinson como protagonista.
La Guerra de Irak, fuente inagotable
Mientras que los atentados del 11 de septiembre ha sido un tema poco prolífico en el cine y el personaje de Bin Laden se ha mantenido en la sombra, la Guerra de Irak ha sido una fuente de material para el séptimo arte. Podría decirse que ha tomado el relevo de la Guerra de Vietnam en las salas. La lista con el conflicto iraquí y la búsqueda de armas de destrucción masiva como telón de fondo es bastante más larga. Algunas de las más destacadas han sido 'En tierra hostil', 'Green Zone. Distrito protegido', 'En el valle de Elah', 'Leones por corderos' o 'Redacted'.
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