Lisboa, 23 jun.- La 29 edición del Festival de Almada, el certamen internacional de teatro más importante de Portugal, trae este julio por primera vez a tierras lusas el espectáculo de danza "La edad de oro", del bailaor sevillano Israel Galván.
Entre el 4 y 18 de julio, once teatros de Almada y Lisboa acogen dieciocho producciones -siete portuguesas y once internacionales-, con una programación que contempla teatro, danza, música y mimo.
Galván es el encargado de estrenar el escenario principal del festival en el primer día del certamen, con una pieza dirigida por Pedro Romero.
Su espectáculo repasa las tradiciones del flamenco de la denominada "edad de oro", que para el autor de la pieza va de finales del siglo XIX a los años treinta del siglo XX.
En esa época fue cuando el flamenco se desvinculó de los dogmas y se dejó influir, en forma de metáforas e imágenes, de la literatura y el cine del momento, de nombres como el cineasta Luis Buñuel y el escritor Franz Kafka.
Pero en esta edición la gran estrella es el mítico director y actor alemán Peter Stein, que participa el 9 y 10 de julio con la pieza "Fantasia Fausto", un recital de extractos de "Fausto", de Goethe, acompañado solo del pianista Giovanni Vitaletti.
Una de las aportaciones más experimentales es la del suizo Christoph Marthaler y la obra "Más o menos cero", un introspectivo ensayo poético sobre la deriva de la Humanidad.
El equipo de dramaturgos y actores de Marthaler se desplazó durante siete semanas a Nuuk, la capital de Groenlandia, para preparar esta pieza, que se representa los días 13 y 14.
Otros estrenos internacionales son el del colectivo belga STAN, que en coproducción con el Teatro Municipal Maria Santos presenta "Nora", inspirado en la célebre heroína de Ibsen y su crítica al matrimonio en el siglo XIX.
Entre los creadores portugueses destacan el reestreno de "El Mercader de Venecia", de Ricardo Pais, y las compañías de teatro Cornucopia, La Comuna, Artistas Unidos y la Compañía Nacional de Bailado.
El director del festival, Joaquim Benite, reconoció que la crisis ha llegado al certamen por la reducción "inevitable" del número de producciones, pero defendió que se mantienen los criterios de "calidad, diversidad y actualidad" en la selección de piezas.
La propia crisis entra a debate en un coloquio dedicado al teatro iberoamericano, que cuenta con la participación de expertos españoles y latinoamericanos, y con la colaboración de Pepe Bablé, director del Festival Iberoamericano de Teatro de Cádiz.-
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