Buenos Aires.- La hazaña del cruce de los Andes en 1817 por las tropas al mando del general José de San Martín, prócer de la independencia de Argentina, Chile y Perú, queda plasmada en "Revolución", la ópera prima del realizador argentino Leandro Ipiña.
El filme, que se estrena hoy en Argentina, es el primer largometraje de Ipiña, discípulo del director Tristán Bauer ("Iluminados por el fuego", "Después de la tormenta" y "Cortázar"), productor de esta cinta.
Rodrigo de la Serna, intérprete junto al mexicano Gael García Bernal de "Diarios de motocicleta" (2004), encarna a un San Martín adusto, exigente, perfeccionista y brillante dirigente.
Pero presenta además a un San Martín humano, con sus luces y sombras, capaz de dar órdenes con vehemencia y, al mismo tiempo, preocuparse por las cuestiones personales de sus hombres.
El filme, producido por Radio y Televisión Argentina, el Ministerio de Educación argentino, Televisión Española (TVE) y las productoras españolas Wanda Films y Lusa Films.
La historia está narrada en la película por el general Manuel Corvalán, quien participó en el cruce de los Andes como joven amanuense de San Martín.
Corvalán, ya anciano y pobre, es entrevistado por un joven periodista en 1880, en vísperas de la repatriación de los restos de San Martín, fallecido en 1850 en Boulogne Sur Mer (Francia).
El periodista pide a Corvalán, único testigo aún vivo de la gesta de San Martín, que le cuente cómo era el "padre de la patria", y el general replica con un "¿y qué es para usted la patria?".
"Seamos libres, que lo demás no importa nada", arenga San Martín a sus hombres antes de enfrentarse a las tropas realistas que amenazan con recuperar las recientemente independizadas Provincias Unidas del Sur.
En la película, el valor de la patria y el de la libertad son el motor que anima a los 5.200 hombres del ejército de San Martín. Una libertad que se retrata de forma colectiva pero también personal.
El San Martín de "Revolución" habla con acento español, ya que el general, nacido en 1778 en Yapeyú, en el Virreinato del Río de la Plata, vivió en España desde los 7 años y se formó allí como militar, hasta que regresó a América en 1812, con 34 años.
El filme recoge el inicio de su campaña militar, con escaso apoyo de las autoridades en Buenos Aires, hasta la decisiva batalla de Chacabuco, donde vence a las tropas realistas.
Muchos de los soldados de San Martín eran negros, campesinos, adolescentes y frailes, que tienen rostro y voz propia en esta película.
El montaje, el sonido, el vestuario y la fotografía son de una factura impecable en "Revolución", que cuenta con el plus de la majestuosidad del escenario ofrecido por los Andes.
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