Steve McQueen, se cumplen 35 años de la muerte de uno de los canallas de Hollywood

  • MADRID, 7 (CHANCE) "Hay algo en mis ojos de perro tristón que convence a la gente de que soy mejor de lo que realmente soy", dijo en una entrevista Steve McQueen, un actor que salió de la nada y pronto se convirtió en uno de los mitos menos convencionales de Hollywood, esa factoría de estrellas en la que Steve nunca encajó demasiado bien.

MADRID, 7 (CHANCE)

"Hay algo en mis ojos de perro tristón que convence a la gente de que soy mejor de lo que realmente soy", dijo en una entrevista Steve McQueen, un actor que salió de la nada y pronto se convirtió en uno de los mitos menos convencionales de Hollywood, esa factoría de estrellas en la que Steve nunca encajó demasiado bien.

Este sábado se cumplen 35 años de su muerte, y el canal TCM le rinde homenaje con la emisión de tres de sus mejores películas.

Desprendía una enorme carisma, tenía una mezcla entre canalla y salvaje que se transmitía a la vez con cierta ternura. Era rebelde e indisciplinado en su juventud y acabó internado en un reformatorio. Cuando salió, se enroló en la marina y tras licenciarse probó fortuna en una infinidad de trabajos.

Fueron los consejos de una amiga los que le llevaron al mundo de la interpretación. Se matriculó en una escuela de interpretación y poco después consiguió una beca para entrar en el famoso "Actor's Studio". Pero no todo fue rodado, trabajó en la televisión hasta que pudo dar el salto al cine para convertirse en uno de los sex simbol más afamados de la década de los sesenta.

Rodó "Cuando hierve la sangre" y "Asalto al banco de San Luis", que le situaron como una de las promesas de Hollywood, filmó en 1960 la película que le convirtió definitivamente en estrella, "Los siete magníficos".

Tres años después tuvo otro enorme éxito con "La gran evasión", en la que además pudo dar rienda suelta a una de sus grandes pasiones: las acrobacias en motocicleta y la velocidad, una pasión que pronto dejó grabada en posteriores películas como "Las 24 horas de Le Mans" o en "Bullitt".

Se casó tres veces, tenía un carácter complicado y autodestructivo. En 1979 le detectaron cáncer y viajó a México buscando soluciones alternativas para la enfermedad, allí murió un 7 de noviembre de 1980, con cincuenta años y la conciencia tranquila de haber hecho siempre lo que más le llenaba y siempre a su manera, "yo vivo para mi y no respondo ante nadie" aseguró en más de una ocación el actor.

Este sábado, para los que quieran recordar algunas de las arriesgadas persecuciones de Steve o simplemente dar un homenaje a un mito del cine TCM emite a las 20:20 "El rey del juego", a las 22:00 "Cazadores a sueldo" y a las 23:40 "Bullit".

Mostrar comentarios