La exposición 'Escenas Etíopes' complementa la imagen con textos de Carles Fabregat y Antonio Colinas para reflejar las dos caras de la realidad del continente negro, por una parte la dureza extrema de las condiciones de vida contrasta con la hospitalidad, la generosidad y la alegría de la gente.
La fotógrafa Cristina García en una clase magistral de inauguración ha asegurado que se trata de un ejemplo de "una sensibilidad exquisita, muy respetuosa con el mundo y la gente, atrevido, valiendo y con muchas ganas de hacer realidad sus proyectos".
Rodero ha definido su trabajo fotográfico como "fotografía humanista, que habla de los conflictos del mundo y de lo que es importante para las personas".
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