La Junta se suma al homenaje a Miguel Hernández en el 75º aniversario de su muerte

  • El delegado territorial de Cultura, Turismo y Deporte de la Junta de Andalucía en Córdoba, Francisco Alcalde, ha presidido este jueves en la Biblioteca Pública Provincial de Córdoba, una representación sobre la vida de Miguel Hernández --en el 75º aniversario de su muerte-- y la lectura de algunos de sus poemas más conocidos , realizado por el Colectivo 'Ohjas Sueltas', creado hace algunos años en la Facultad de Filosofía y Letras de Córdoba.
EUROPA PRESS
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La Administración autonómica ha indicado que en sus comienzos el colectivo publicó la revista 'Ohjas Sueltas' y se implicó en la realización de actos culturales en la Casa de la Juventud, además de diferentes actividades literarias en la facultad. En el año 2012, organizaron 'Dinamopoética', la sección joven del festival literario Cosmopoética.

Tras un paréntesis de dedicación individual a sus trabajos y estudios, llevan algunos años coordinando un club de lectura en la Biblioteca Provincial y realizando talleres en institutos y colegios.

Los integrantes de 'Ohjas Sueltas' son Daniel Perea, actor que realiza la obra, Salvador Blanco, Antonio Morales y Francisco Ropero, además de la participación de otras personas que han colaborado y trabajado con el colectivo a lo largo de su vida.

Miguel Hernández nació en Orihuela (Alicante) el 30 de octubre de 1910. De familia humilde, tiene que abandonar muy pronto la escuela para ponerse a trabajar. Sin embargo, su preparación intelectual siguió gracias a las bibliotecas de amigos como Ramón Sijé. Fue un gran lector de la poesía clásica española.

A partir de 1930 comenzó a publicar sus poesías en revistas como 'El Pueblo de Orihuela' o 'El Día de Alicante'. Viajó a Madrid y colaboró en distintas publicaciones, estableciendo relación con los poetas de la época. De vuelta a Orihuela redactó 'Perito en Lunas', donde se refleja la influencia de los autores que lee en su infancia y los que conoce en su viaje a Madrid.

Poco después, se estableció en Madrid y trabajó como redactor en el diccionario taurino de Cossío y en las Misiones pedagógicas de Alejandro Casona y colaboró en importantes revistas poéticas españolas. En estos años escribió los poemarios 'El silbo vulnerado' e 'Imagen de tu huella', y, el más conocido, 'El Rayo que no cesa', inspirado en el amor de su vida, Josefina Manresa.

Durante la guerra compuso 'Viento del pueblo' y 'El hombre acecha con un estilo' que se conoció como 'poesía de guerra'. En la cárcel acabó 'Cancionero y romancero de ausencias (1938-1941)'. En su obra se encuentran influencias de Garcilaso, Góngora, Quevedo y San Juan de la Cruz.

Tomó parte muy activa en la Guerra Civil española, y al terminar ésta intentó salir del país, pero fue detenido en la frontera con Portugal. Condenado a pena de muerte, se le conmutó por la de 30 años que no llegó a cumplir porque murió de tuberculosis el 28 de marzo de 1942 en el Reformatorio de Adultos de Alicante.

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