"El látigo del Castlevania es una manguera de ducha"

  • Castlevania: Lords of Shadow es posiblemente la mayor producción del videojuego español. El estudio Mercury Steam, con sede en Madrid, fue el elegido por la empresa japonesa Konami para darle un giro a la saga. El compositor Óscar Araujo fue el responsable de los efectos de sonido y la banda sonora, que ha sido reconocida con un premio de la IFMCA.
El látigo de Castlevania es una manguera de ducha
El látigo de Castlevania es una manguera de ducha
lainformacion.com
V. Navarro

Los videojuegos son algo irreal y poco creíble, como las películas de animación, pero el sonido es lo que le da la sensación de realidad y credibilidad, cuenta el compositor Óscar Araujo. "Lograr que la gente llore con unos muñecos en 3D, como sucedió con Toy Story, se consigue gracias al sonido", sentencia.

Araujo compuso la banda sonora y parte de los efectos sonoros de Castlevania: Lords of Shadow, una de las mayores producciones españolas de la industria del videojuego. El compositor español ganó el premio de la IFMCA (International Film Music Critics Association) a la mejor banda sonora de videojuegos con este trabajo. Explica la gran paradoja de producir efectos de sonido: hay que exagerarlos y casi inventárselos para que parezcan reales.

"Los puñetazos, las patadas, las armas impactando contra la carne, apenas hacen ruido en la vida real", explica, "y sin embargo en las películas y en los videojuegos suenan muchísimo".

Gabriel Belmont, el protagonista de la saga Castlevania siempre va armado con un látigo metálico y dagas arrojadizas. "El sonido del látigo está hecho con la manguera de una ducha. Al rozarlo con una lámina metálica y tratarlo informáticamente sonaba como si la cadena pesara doscientos kilos". Hay que sacar sonidos de la nada y, ante eso, imaginación. El silbido de los cuchillos, por ejemplo, se hizo sacando pañuelos de una caja muy deprisa.

Las voces y los sonidos de los monstruos también hay que inventarlos completamente. Araujo comenta que esto suele hacerse modulando y tratando voces y mezclando los ruidos que hacen varios animales.

En videojuegos, mejor que en cine

Óscar Araujo ha compuesto la música de varios videojuegos y películas explica que el trabajo en cada medio es diferente. Cuenta que para cine se compone una música sincronizada con la imagen de principio a fin, pero en el videojuego hay que crear una ambientes, acompañar mapas y acciones.

Araujo trabajó con el equipo de Mercury Steam en Castlevania: Lords of Shadow desde el principio. Le dieron pautas y conceptos para componer una música épica que acompañara a un guión y una historia que él conocía desde el primer momento. Ahí es donde se componen las melodías principales. Luego, mientras el estudio desarrollaba mapas y personajes, él iba ambientándolos con música a la vez.

El compositor confiesa que trabajar para videojuegos es más satisfactorio que trabajar en cine. "En España me he encontrado con productores a los que la música les da igual. Si por ellos fuera, ni la pondrían", asegura. En videojuegos, cuenta Araujo, están más abiertos a recibir ideas y se valora mucho al músico porque saben que el audio es muy importante para el videojuego.

Cada vez se reconoce más la tarea de los compositores en la industria del videojuego. Recientemente se anunció que los Grammy entrarán a valorar también las bandas sonoras de juegos en cuatro de sus categorías. "El videojuego se ha convertido en una parte muy importante del entretenimiento. Toda la industria está viendo que si no se sube al carro, el mundo del videojuego va a ir por su cuenta y van a perder oportunidades", concluye Araujo.

Mostrar comentarios