El productor de Lady Gaga vivía en la miseria antes de conocerla

  • Bajo el pseudínomo de RedOne se esconde Nadir Khayat, un productor marroquí que convierte en oro todo lo que toca. Creador de éxitos mundiales, este hombre pasó de dormir en un colchón hinchable a ver cómo millones de personas escuchan sus temas.
Lady Gaga preparándose para la fama en su disco anterior.
Lady Gaga preparándose para la fama en su disco anterior.
Universal
Aida Alami, Rabat (Marruecos) | GlobalPost

Es bien sabido que detrás de cada estrella de la música se esconde un gran productor. Pero ¿sabías que detrás de algunas de las grandes figuras de la actualidad está un productor marroquí?

Desde que su carrera empezó a tomar impulso en 2007, RedOne, un marroquí que emigró a EEUU a través de Suecia, ha convertido en oro todo lo que toca.

Descubrió a la mayor estrella del pop del mundo en la actualidad, Lady Gaga; le dio un nuevo impulso a la carrera de Jennifer López este año, y fue uno de los últimos productores que grabó temas con Michael Jackson antes de su muerte.

 "Sé que soy un creador de éxitos, siempre lo he sido. Sé cómo se debe de vender un éxito", asegura RedOne, que también es escritor de canciones. "Pero se tienen que dar las circunstancias correctas. Pasé por muchas etapas antes de lograr el éxito, desde no tener un lugar donde dormir hasta ver cómo millones de personas escuchan mis éxitos cada día en todo el planeta".

RedOne sabe manejarse sin duda con las canciones. Pero, ¿quién es en realidad el hombre que está detrás del seudónimo?

Nadir Khayat dejó su ciudad natal de Tetuán, en Marruecos, cuando tenía 19 años, con la esperanza de poder hacerse un hueco en la industria musical de Suecia. Dos décadas más tarde, con tres premios Grammy y millones de álbumes vendidos, RedOne es la persona que está detrás de docenas de números uno en las listas de ventas.

Los dos primeros álbumes de Lady Gaga, que él produjo casi en su totalidad, han vendido 15 millones de copias y se han descargado 51 millones de canciones. También ha trabajado con Enrique Iglesias, Marc Anthony y Pitbull, entre otros.

La canción "Just dance" producida por RedOne, fue la plataforma de lanzamiento de Lady Gaga y revolucionó la música pop, según Sasha Frere-Jones, crítico musical del New Yorker. "Fue uno de los primeros grandes temas de la nueva ola del pop, alejado del hip hop y de nuevo con sonido disco, la música que ha copado las listas de éxitos de Europa durante mucho tiempo", escribe. "Habiendo vivido mucho tiempo en Suecia, RedOne sabe acceder a la enorme reserva de recursos nórdicos que los estadounidenses nunca logran igualar".

El gran éxito le llegó al productor marroquí de 39 años tras años de trabajo duro y dificultades. Asegura que lo que le animaba a seguir era su determinación y el apoyo de su familia. "Soy muy afortunado. Le había prometido a mi familia que me convertiría en el mejor en mi especialidad", confiesa.

Cuando llegó a Estocolmo en 1991, con el pelo largo y una guitarra, era un enorme fan del grupo de rock sueco Europe (llegó a esperar a su líder, Joey Tempest, en la puerta de su casa hasta lograr pasar una hora cantando y charlando con él). Tras un intento fallido de convertirse en cantante de rock, decidió estudiar programación informática al tiempo que descubría los secretos de la producción musical.

A principios de siglo ya era conocido en la escena musical de Escandinavia, así que en 2002 decidió probar suerte en Nueva York. "Quería demostrarle a mi familia que era bueno. Sabían que era bueno, pero nunca conseguían oír lo que hacía porque la música de Suecia no llega a Marruecos", asegura.

Finalmente logró su primer éxito mundial cuando la canción "Bamboo", con Shakira y Wyclef Jean (una mezcla de "Hips don't lie" y un cántico marroquí), fue elegido tema oficial del Mundial de Fútbol 2006. Aún después de este gran éxito, todavía le costaba salir adelante, llegando muchas veces a perder acuerdos con grandes compañías discográficas en el último momento a favor de otros grandes productores.

A principios de 2007 RedOne estaba comenzando a desanimarse. Dormía en un colchón inflable con su mujer en Jersey City, no tenía dinero y estaba a punto de regresar a Suecia. "Estaba realmente deprimido. Le dije a mi mujer 'tenemos que irnos'", recuerda. "Me dijo que pidiésemos prestado dinero y que lo intentásemos unos cuantos meses más. Si no pasaba nada, entonces nos rendiríamos".

El cambio de suerte ocurrió un día de 2007, durante una reunión con Epic Records para presentar una canción para el álbum de debut de Kat DeLuna. RedOne empezó a tocar canciones delante del presidente de la compañía, Charlie Walk.

 "Estaba realmente nervioso. Le toqué 'Whine up'. Charlie Walk me interrumpió y dijo: 'Para, ¡eres un genio!'. No me lo podía creer. Nos pasamos el resto del tiempo poniendo música y bailando. Fue surrealista", dice.

Walk se quedó tan impresionado que pidió a RedOne que produjese el álbum entero. En su primera semana, la canción "Whine up" fue la canción más solicitada en la radio neoyorquina Z100.

Su plan era trabajar con superestrellas para capitalizar ese éxito, pero su manager le pidió que se reuniese con una joven que todavía no había firmado con ninguna discográfica. Aquella joven, Stefani Joanne Angelina Germanotta, es ahora la archiconocida Lady Gaga.

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