El Festival Internacional en el Camino de Santiago entrega invitaciones para sus conciertos gratuitos

Organizado por la Diputación Provincial de Huesca, las invitaciones permitirán acceder a las actuaciones con carácter gratuito que tendrán lugar en iglesias y otros espacios histórico artísticos de la provincia de Huesca. La entradas también podrán retirarse en el Palacio de Congresos de Jaca, de lunes a viernes, en horario de 10.00 a 13.00 y de 17.00 a 19.00 horas.

Por otro lado, el director del certamen, Luis Calvo, ha detallado que "continúa a buen ritmo la venta de entradas para las actuaciones de La Fura dels Baus y Divina Mysteria, más la de Soqquadro Italiano, que se celebrarán en el Palacio de Congresos de Jaca", ha detallado, y las entradas se pueden adquirir en la web 'http://festivalcaminosantiago.bticket.es'.

"En el festival hay espacio para la reinterpretación. Este año presentamos estos dos espectáculos que se acercan a la experimentación, en la recreación y mezcla de disciplinas", ha destacado Luis Calvo.

El XXVI Festival Internacional en el Camino de Santiago se celebrará del 4 al 30 de agosto a camino entre las localidades altoaragonesas de Jaca, Santa Cruz de la Serós, Berdún, Hecho, Siresa y Bailo.

LA FURA DELS BAUS y SOQQUADRO

'Free Bach 212', cantata profana 212 de J.S. Bach (BWV 212) a cargo de La Fura dels Baus y Divina Mysteria, bajo la codirección, idea y guión de Miki Espuma y David Cid, podrá verse el día 13 de agosto a las 22.30 horas.

Se trata de una versión libre de la partitura original de la Baukernkantate, la Cantata de los campesinos de Johann Sebastian Bach, 'Free Bach 212', que mezcla el barroco con las músicas electrónicas, la imagen multimedia, el flamenco y una poética contemporánea del espectáculo.

Asimismo, el 20 de agosto a las 22.00 horas, el Soqquadro Italiano acudirá a Jaca con su 'Stabat Mater. Vivaldi Project', que contará con Vincenzo Capezzuto, voz y danza, bajo la coreografía de Mauro Bigonzetti y la dramaturgia y dirección de Claudio Borgianni, un trabajo donde la música, el canto y la danza se unen para esbozar una especie de 'opera totale'.

Claudio Borgianni reescribe un Vivaldi "totalmente nuevo e inédito, dando la posibilidad a Vincenzo Capezzuto de moverse, con extrema facilidad, del canto a la danza, a unos pequeños momentos de actuación, asegurándose de que el espectador pierda el horizonte de los límites entre los distintos géneros de las artes escénicas".