La policía austriaca buscaba el viernes a varios militantes de extrema derecha que habían perturbado en Viena la representación de una obra de teatro representada por refugiados, subiendo al escenario y lanzando falsa sangre al público.
El incidente se produjo el jueves por la noche poco después del inicio de la obra "Die schutzbefohlenen" ("Los suplicantes"), una obra del premio Nobel de Literatura austriaco Elfriede Jelinek, interpretada por un grupo de actores aficionados formado por refugiados sirios, iraquíes y afganos.
Según la policía, unos 30 manifestantes invadieron el escenario durante algunos minutos izando banderas y una pancarta donde se podía leer "¡Hipócritas. Nuestra resistencia contra vuestra decadencia!".
También arrojaron folletos afirmando que el "multiculturalismo mata" al mismo tiempo que lanzaron falsa sangre sobre los 700 espectadores presentes en la sala de la Universidad de Viena, precisó un portavoz de la policía a la agencia austriaca APA.
Se desató luego una corta pelea entre espectadores y extremistas, que fueron finalmente expulsados de la sala. La obra pudo así continuar.
Ocho denuncias por daños corporales fueron presentadas, según la policía.
El ministro de Cultura, Josef Ostermayer, calificó este episodio el viernes como "escandaloso", el último ataque de una serie de provocaciones de este grupúsculo, llamado "Los identitarios".
Esta obra de Jelinek, presentada por primera vez en Alemania en 2014, es un ataque feroz contra el tratamiento juzgado inhumano dado a las personas que piden asilo en Europa.
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