La pensión de las mujeres es un 40% inferior a la de los hombres

La brecha entre las pensiones que reciben hombres y mujeres se sitúa en casi el 40%, según el estudio "Impacto de las pensiones en la mujer: jubilación y calidad de vida", presentado hoy por el IESE Business School y la Fundacición Vida Caixa.

El estudio analiza las necesidades de las personas y de las familias con especial atención a la situación de las mujeres, estudiando fórmulas que permitan mantener su nivel adquisitivo tras la vida laboral activa.

Así, según el informe, el aumento de la esperanza de vida y las bajas tasas de natalidad están poniendo en riesgo la calidad de vida de las generaciones futuras, y en particular, de las mujeres, a cuyo cargo está, en la mayoría de los casos, el ciudado de los hijos pequeños y de los mayores dependientes. Estos factores se ven agravados por la crisis económica, lo que repercute en la sostenibilidad financiera del sistema de pensiones de nuestro país.

El estudio señala que la situación laboral de las mujeres, y otros factores como el no reconocimiento en el cómputo de la pensión de los años dedicados al cuidado de sus hijos, comprometen la vejez femenina. Esto es así, según el informe, porque la mayoria de conflictos de conciliación entre trabajo y familia se resuelven porque la mujer, o bien renuncia durante un periodo de tiempo a un trabajo remunerado, o bien reduce su jornada laboral.Envejecimiento de la población

Según las proyecciones del INE, la esperanza de vida al nacer será, en 2021, de 81'2 años para los hombres y de 86'5 para las mujeres. En 2051, se podría llegar a los 86'8 años para los varones y los 90'8 para ellas. El aumento de la esperanza de vida y el descenso de la natalidad, hacen de España uno de los países más viejos del mundo.

La esperanza de vida en la mujer es 5 años superior a la del hombre, por lo que, según el estudio, se puede hablar ya de una "feminización de la mujer". Según el INE, España pasará de tener un 17% de la población mayor de 64 años en 2011 al 37% en el 2052.

Por tanto, el número de pensionistas prácticamente se duplicará y pasará de los 8 a los 15 millones. Al mismo tiempo, la población en edad de trabajar se reducirá en un 33%. Según el estudio, la sostenibilidad del sistema público de pensiones no dependería de una disminución de la población en términos absolutos si ese descenso se produjese de manera proporcional en todos los grupos de edad.

"Lo que realmente pone contra las cuerdas la futura viabilidad del sistema es el desequilibrio que se produce al disminuir la población menor de 24 años y la comprendida entre los 26 y los 65 años, y el crecimiento del grupo de edad de mayores de 65 años", dice el informe. De esta forma, la tasa total de dependencia en España en el 2052 sería del 99'54% lo que provocará que cada persona activa tendría que sostener a una inactiva.Años cotizados

Hasta 2013, no han estado suficientemente reconocidos, a efectos de cotización, los períodos dedicados al cuidado de los hijos pequeños, ya que sólo se consideraba cotizado el primer año de los tres a los que se tiene derecho de excedencia para el cuidado de hijos.

En el caso español, mientras que los hombres han trabajado una media de 43'4 años, las mujeres sólo han trabajado de forma remunerada un promedio de 12'8 años, la cifra más baja de Europa. A las causas anteriores, una menor dedicación de horas de trabajo remunerado y un menor número de años de trabajo retribuido hace que las mujeres obtengan unos menores ingresos que los hombres.

Así, la brecha salarial en España hizo que en 2011, el salario medio anual del trabajador fuese de 22.900 euros. En el caso de las mujeres, representa un 77% del masculino.El sistema de pensiones público, al basarse en las cotizaciones que dependen del salario percibido, perpetúa las desigualdades salariales del mercado laboral.

"Esto tiene un importante impacto negativo para las mujeres pensionistas, ya que, exceptuando los tramos más bajos, las prestaciones por jubilación siempre son inferiores al salario percibido durante la etapa laboral. Así pues, muchas mujeres pueden llegar a percibir una pensión que no les permita el acceso a un nivel mínimo de calidad de vida".

La pensión media en España en 2012 fue de 858 euros, pero mientras que para los hombres fue de 1.067 euros, para las mujeres fue de 659 euros, un 38% menos. En España, el riesgo de pobreza de las mujeres es un 12% superior a los hombres.El estudio señala que esta situación se repite en la mayoría de países europeos, incluso en aquellos con más amplia cobertura del llamado Estado del Bienestar, como Suecia o Noruega.

Con ello, se indica además que la mujer llega a la vejez con una peor salud que el hombre. Así, aunque ellas viven cinco años más que ellos, tienen más riesgo de enfermedades o problemas de salud crónico. Se considera que un 65% de los hombres sufre alguna enfermedad al llegar a la vejez, frente al 71% de las mujeres. Esto provoca que ellas tengan mayor posibilidades de acabar como dependientes y caer en niveles de pobreza.Posibles soluciones

El estudio propone algunas soluciones para aliviar la situación, por ejemplo, que el Estado aporte la cotización de jubilación de las mujeres en caso de excedencia o parcialmente, en casos de reducciones de jornada, mientras permanezcan al cuidado de los hijos más pequeños o de mayores dependientes. Asimismo, indican que el tiempo dedicado a la atención de los hijos de hasta 12 años y a los familiares dependientes compute como tiempo cotizado a la Seguridad Social para poder recibir la pensión de jubilación. Entre otros consejos, señalan la desgravación fiscal del coste de cuidadores, la revisión de la pensión de viudedad para no cotizantes y fomentar la educación para el ahorro.