La jueza considera que no ha quedado acreditado que el accidente, que acaeció al descarrilar el tren en la curva previa a la estación de Jesús, cuando circulaba a 80 kilómetros por hora en un tramo con velocidad limitada a 40, se produjera por un fallo en el vagón o en la vía, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia en un comunicado.
Según el TSJCV, los peritos descartan fallos en los frenos, el vagón y en las vías; la unidad siniestrada no tuvo ninguna avería en los frenos y los expertos rechazan que exista relación entre el accidente de 2006 y los descarrilamientos ocurridos varios años antes. Asimismo, la magistrada instructora no aprecia ninguna vinculación entre el siniestro y la formación y capacitación del maquinista fallecido.
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