Así lo ha manifestado el técnico Edmundo Parras a su llegada a los juzgados de O Porriño para asistir, junto con representantes de Renfe; Adif y Comboios de Portugal, al volcado de datos de la caja negra del tren.
Parras ha explicado que el cometido de la CIAF, en la que hay funcionarios en activo y jubilados expertos en ferrocarril, "no es buscar culpables", sino detectar problemas y "debilidades" para "hacer recomendaciones que mejoren el sistema ferroviario".
A lo largo de la mañana de este martes se volcarán los datos de la caja negra en presencia de la titular del Juzgado de Instrucción Número 2 de O Porriño que investiga el accidente. En este sistema de registro quedan grabados datos como velocidades y distancias; asimismo han quedado plasmadas las posibles llamadas desde el teléfono 'tren-tierra' a los puestos de mando.
Mientras, los restos del convoy accidentado permanecen en la estación de ferrocarril de O Porriño custodiados por la Guardia Civil, a la espera de la autorización judicial para su traslado a dependencias de Renfe en Redondela (Pontevedra).
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