Según un comunicado de este domingo, la Unidad Regional de Medio Ambiente (URMA) de los Mossos detectaron el lunes en el Cabo de Creus (Girona) a un barco fondeado y a dos buceadores que sacaban sacos del agua, por lo que se acercaron a la embarcación en una unidad de la Dirección General de Pesca con el objetivo de interceptar a los sospechosos y revisar el contenido de los sacos.
Los pescadores, sorprendidos, tiraron los sacos al agua y huyeron a gran velocidad a través de los canales de la zona, pero al llegar a un punto sin salida dieron media vuelta y aceleraron "deliberadamente en dirección al barco donde iban los agentes", con el que chocaron frontalmente.
Pese a la colisión, los Mossos consiguieron saltar al barco de los presuntos delincuentes y detuvieron al patrón "cuando ya se disponía, de nuevo, a retomar la marcha".
Los agentes recuperaron uno de los sacos lanzados al mar, que contenía 2,02 kilos de coral rojo y posteriormente una unidad acuática localizó la segunda bolsa, con 3,3 kilos de coral, por lo que se denunció a las tres personas por pesca de coral sin licencia y pesca en la zona de reserva del Cabo de Creus, infracciones muy graves según la Ley de Pesca y de Acción Marítima.
El patrón del barco, de 51 años y con antecedentes, pasó a disposición judicial el martes y quedó en libertad con cargos.
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