"Biescas debe ser hablar de solidaridad", sostiene el familiar de una de las 87 víctimas de la riada de 1996

"Biescas debe ser hablar de solidaridad", sostiene el familiar de una de las 87 víctimas de la riada de 1996
"Biescas debe ser hablar de solidaridad", sostiene el familiar de una de las 87 víctimas de la riada de 1996
EUROPA PRESS
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El hijo de una mujer fallecida en 1996 en la riada del camping Las Nieves de Biescas (Huesca), Oriol Espinosa Llorens, ha instado a que esta localidad pirenaica deje de asociarse a "sufrimiento y dolor. Hay que cambiarlo porque no es justo, ni conveniente que la herida siga abierta", ha enfatizado.

"Biescas debe ser hablar de solidaridad porque lo que hicisteis fue abrir vuestros corazones y procurar un sinfín de nuevas colaboraciones", tanto institucionales, como vecinales y de voluntariado, ha elogiado Oriol Espinosa.

De esta forma se ha expresado este hombre que roza la cuarentena, quien perdió a su madre, Carmen Llorens, esa tarde de hace 20 años cuando él tenía 19 años y ha asegurado que "doy por saldada la despedida que se nos ha hecho esperar".

Los familiares las 87 víctimas mortales del camping Las Nieves de Biescas (Huesca) les han despedido de una forma "digna y necesaria" con motivo del XX aniversario de la riada que asoló el 7 de agosto de 1996 estas instalaciones turísticas del valle de Tena.

Delante del monumento que recuerda a las víctimas, situado en las instalaciones que en su día albergaron el camping Las Nieves, Oriol Espinosa ha leído una carta en la que ha simulado ser su madre la autora para despedirse en nombre de los otros 86 fallecidos.

"Hoy estamos aquí para deciros adiós de una forma tranquila y serena" ha dicho Oriol Espinosa por boca de su madre para dejar claro a todos los familiares que "debéis recordar otra riada, la que generó un caudal de solidaridad a todos los niveles. Esa fue nuestra riada y no otra", ha puntualizado.

Visiblemente emocionado, este joven campista hace 20 años ha relatado que entonces "se abrieron las puertas de un río fiero, pero también las de vuestras casas --los vecinos de Biescas y otra localidades que acogieron damnificados-- y se cambiaron los protocolos de salvamento, que cuántas vidas más habrán salvado. Os lo habéis preguntado" ha sugerido Oriol simulando ser la voz de su madre.

VOLUNTARIOS ANÓNIMOS

En esta evocación ha conminado a los asistentes a que "si os brotan lágrimas por despedirnos, que mañana broten alegremente por lo que queda por vivir".

Oriol Espinosa ha subrayado que con este acto se "pone fin a un etapa en la que hemos pasado de las heridas a las cicatrices, luego a la experiencia y finalmente a la sabiduría". Tras citar al poeta Antonio Machado ha concluido al invitar "a caminar" a todos los asistentes.

A Oriol Espinosa le ha precedido en el uso de la palabra el alcalde de Biescas, Luis Estaún, quien ha explicado que el Parque Memorial Camping Las Nieves, además de las víctimas está dedicado a los "cientos de voluntarios anónimos" que asistieron a los damnificados.

El memorial es una escultura de piedra, realizado por la escultora jaquesa Teresa Pueyo, que tiene esculpidas flores 'siemprevivas' y un texto que reza "Del cauce de un rió salado y fiero, con lágrimas desvanecidas por el tiempo, dulces susurros laten en el recuerdo de su pronto descanso cálidos y sereno". En la parte trasera del monumento se recuerda que es "en memoria de las víctimas de la riada del barranco de Arás".

Estaún se ha mostrado convencido de que "vamos a salir fortalecidos tras este acto" y seguidamente la conductora de la ceremonia, la periodista de Aragón TV, Ana Laiglesia, ha leído los nombres de las 87 víctimas mortales.

El recuerdo a los nombres de cada uno de los fallecidos ha estado arropado el conjunto de violines "La caja de música" de Sabiñánigo, que ha interpretado las obras "Arioso de la cantata BWV" de Johan Sebastian Bach; y "Gavotte" de Joan Philipe Rameau.

SILENCIO

"La palabra más hermosa que podría decir es silencio" ha sintetizado la consejera de Derechos Sociales y Ciudadanía del Gobierno de Aragón, María Victoria Broto, al explicar que "evoca esos momentos y nos recuerda perfectamente qué paso ese día".

Broto ha dicho que "podemos recordar dónde estábamos cada uno y cómo vimos las primeras caras de dolor y asombro y luego comprendimos el nivel de la tragedia".

No obstante, ha estimado que "sería egocéntrico pensar que eso es lo importante" y ha animado a centrarse en los que perdieron familiares porque luego han tenido que construirse su vida, pero sin ellos".

También ha aludido a la "solidaridad de las gentes de Biescas y de los pueblos de alrededor", para aseverar que el monolito que se erige en el que fuera el camping Las Nieves es un "homenaje a los supervivientes, la solidaridad, el encuentro y el reconocimiento".

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