Así lo ha dado a conocer la Junta Local de Seguridad, que ha aprobado este martes el Plan Específico de Colaboración y Coordinación de la Semana Santa de Cuenca 2017, que tiene por objetivo coordinar las actuaciones de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad para garantizar el orden público y la seguridad ciudadana durante esos días, según ha informado en nota de prensa el Ayuntamiento de Cuenca.
La seguridad proporcionada por parte del Ayuntamiento contará con la presencia de ocho vigilantes de seguridad contratados para la procesión del Hosanna el Domingo de Ramos. Además, con motivo de la procesión Camino del Calvario, la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) del Cuerpo Nacional de Policía que colabora con la organización, estará conformada por un grupo de 10 agentes de Toledo y otro de 17 de Albacete.
Asimismo, la Junta de Cofradías refuerza la seguridad en la Iglesia de San Felipe Neri, tanto durante la Bendición de las Palmas de la Procesión del Hosanna como durante el Miserere de la Procesión Camino del Calvario.
El objetivo, según el Ayuntamiento, es controlar la ocupación del espacio para garantizar que el recorrido procesional y las vías de evacuación establecidas en los dos callejones laterales de la Iglesia quedan despejados. En este sentido, se ha recordado a los espectadores deben ocupar exclusivamente las aceras, quedando prohibido invadir la calzada, evitando cruzar durante el paso de la procesión y colaborando con las indicaciones de las autoridades.
"EVITAR ASISTIR CON CARRITOS DE BEBÉ"
Como recomendación a los padres, se ha insistido en la conveniencia de evitar asistir con menores y carritos de bebé a las zonas de mayor aglomeración de público en determinados momentos de los desfiles procesionales como son la calle Obispo Valero, la Plaza Mayor, la anteplaza y la calle Alfonso VIII.
Igualmente, el Domingo de Ramos, a la llegada de la Procesión del Hosanna a la Plaza Mayor, también se reforzará el control para delimitar la zona correspondiente a los espectadores y la del desfile procesional.
Además, por parte del Cuerpo Nacional de Policía se potenciarán los controles de armas blancas y objetos peligrosos, de igual forma que la Guardia Civil hará lo propio con los controles de alcoholemia y drogas a los conductores.
La reunión ha sido copresidida por el alcalde de Cuenca, Ángel Mariscal, y la subdelegada del Gobierno, Lidón Lozano. Previamente, y con el mismo objetivo ha tenido lugar la Junta Local de Protección Civil.
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