Una Eurocopa con sorpresas, hooligans, poco fútbol y primer título de selección de Cristiano

La Eurocopa de fútbol, que terminó este domingo con la victoria de Portugal en la prolongación ante Francia (1-0), no pasará a la historia por su buen juego ni por una gran estrella, aunque Antoine Griezmann, con sus seis tantos, fue el máximo goleador.

Con Griezmann rivalizó un Cristiano Ronaldo intermitente, que marcó tres goles y tuvo que ver desde el banquillo el triunfo de sus compañeros, tras dejar la final por lesión en el minuto 25.

Fue una Eurocopa de sorpresas, comenzando con el triunfo de Portugal, las semifinales de Gales y los cuartos de final de Islandia.

Portugal ganó con un juego especulativo y defensivo, aunque contó con un buen estratega como Fernando Santos, derrotando en la final a Francia, en un Eurocopazo en el que traicionó su habitual 'Jogo bonito', sin que se pudiera lucir un Cristiano Ronaldo intermitente.

"Nos aporta poco ser muy espectaculares si luego no ganamos. Podemos ser poco espectaculares, pero ganamos. No me importa ser el patito feo. Si me preguntan ¿prefiere ser bonito y perder o ser feo y ganar, prefiero ser feo", señaló Fernando Santos durante la competición.

El seleccionador francés Didier Deschamps, más bien especulativo antes de la Eurocopa, decidió ser más ambicioso, con un juego más ofensivo, con un tridente Antoine Griezmann-Olivier Giroud-Dimitri Payet.

Además de Griezmann y el primer gran título internacional de Portugal, lo más destacado, además de las muchas sorpresas, fue la reaparición del hooliganismo, sobre todo una batalla campal entre rusos e ingleses en Marsella.

Portugal se encontró con un camino despejado hasta la final, logrando solo en semifinales contra Gales (2-0) imponerse en el tiempo reglamentario.

Antes había empatado contra Islandia (1-1), Austria (0-0) y Hungría (3-3) en la primera fase, para luego ganar en la prolongación en octavos a Croacia (1-0) y en los penales a Polonia (1-1) en cuartos.

Su triunfo más claro fue en semifinales, contra Gales (2-0).

En la final, encontró su primer gran rival de entidad, Francia, y lo ganó.

Francia le había ayudado eliminando en semifinales al gran favorito, Alemania (2-0).

España, que empezó jugando bien, se hundió perdiendo su último partido de la primera fase contra Croacia (1-0) y en octavos contra Italia (2-0), por lo que tuvo que decir pronto adiós a sus pretensiones de ganar un tercer título consecutivo.

La Roja se marchó acompañada de un buen inicio de Andrés Iniesta, un mal torneo de Sergio Ramos, y el traspaso de poderes en la portería de Iker Casillas a David de Gea.

Además, el torneo sirvió de adiós al seleccionador Vicente del Bosque, que dejó su cargo, algo que ya tenía decidido.

Peor decepción fue la de Inglaterra, que tras haber llegado a la fase final habiendo ganado todos su partidos en las eliminatorias, quedó segunda en la primera fase, para ilustrar en octavos la peor página de su historia futbolística para caer ante la débil Islandia (2-1).

Italia tuvo una buena Eurocopa pese a caer en cuartos de final contra Alemania (1-1) por penales, después de haber derrotado en la primera ronda a Bélgica (2-0), segunda del ránking FIFA, y en octavos a España (2-0), con una selección sin grandes nombres en ataque pero con toda la defensa del campeón Juventus.

Si faltó juego o una selección atractiva, lo mejor fueron las sorpresas, lideradas por el triunfo de Portugal, algo que se podía dar más con la nueva fórmula de 24 equipos, frente a la antigua de 16.

De este modo, Islandia fue lo mejor del torneo, con un país de 330.000 habitantes que fue capaz de empatar a Portugal (1-1) en la primera fase y ganar a Inglaterra en octavos (2-1), antes de caer frente a Francia en cuartos (5-2).

En el mismo sentido se puede hablar de Gales, que plantó cara a Inglaterra en la primera fase, poniéndose por delante en el marcador, para caer por 2-1, lo que no le impidió ser primero de grupo.

Después superó en octavos a Irlanda del Norte (1-0) y sobre todo en cuartos a Bélgica (3-1), la segunda selección del ránking mundial.

A nivel de jugadores destacó Griezmann. Fue una estrella casi inesperada de una constelación en la que aparecían Andrés Iniesta, Sergio Ramos, Gianluigi Buffon, Gareth Bale, Eden Hazard, Manuel Neuer, Thomas Muller, Mesut Ozil, Wayne Rooney, Zlatan Ibrahimovic y Cristiano Ronaldo.

Griezmann fue el único gran triunfador, en una competición en la que decepcionaron Sergio Ramos, Thomas Muller, Wayne Rooney o Zlatan Ibrahimovic, mientras que Iniesta, Hazard, Cristiano, Bale y Ozil fueron intermitentes, igual que los alemanes Neuer y Tony Kroos, que tuvieron una buena Eurocopa en su conjunto.

Aunque lo peor de esta Eurocopa no fue ningún jugador ni ningún equipo sino los hooligans, en particular rusos e ingleses.

Los violentos enfrentamientos antes y después del partido entre sus selecciones en Marsella se saldaron con 35 heridos, la mayoría ingleses, dos de ellos graves.

Fue un aviso, una voz de alarma de que el Mundial de Rusia-2018 deberá poner mucha atención en el peligro del hooliganismo.