Los bajos fondos del deporte: el despilfarro de dinero público en las federaciones

Las cloacas del deporte: despilfarro y corrupción en las federaciones españolas
Las cloacas del deporte: despilfarro y corrupción en las federaciones españolas

La operación Soule ha destapado la supuesta trama de corrupción que el presidente de la Federación Española de Fútbol, José María Villar, habría tejido durante treinta años para su enriquecimiento personal y el de sus familiares a través del amaño de partidos de fútbol. Es solo uno de los muchos casos de despilfarro o corrupción que ensucia los éxitos del deporte español. Tenis, baloncesto o tiro con arco son algunas de las disciplinas manchadas por denuncias, pucherazos electorales o gastos pagados con la tarjeta de la federación.

Parte de las investigaciones y denuncias contra las federaciones son fruto del empeño del Consejo Superior de Deportes (CSD) por controlar los fondos públicos que, a través de subvenciones, son destinadas a las distintas federaciones. Todo parte de la Ley de Transparencia de 2013 que en su capítulo II establece que las entidades que, “por su especial relevancia pública”, perciben subvenciones “tienen la obligación de presentar información institucional, organizativa, de planificación como la información económica, presupuestaria y estadística con el fin de reforzar las transparencia de su actividad”.

Según la memoria de 2016, el CSD otorgó subvenciones por valor de 50,9 millones de euros, repartidos entre 66 federaciones, es decir el dinero público supone el 34,4% del presupuesto de las federaciones. En este reparto no se encuentra la institución presidida por Villar que recibió la última subvención de este organismo en 2011. Al no estar incluida en las estadísticas, además de permitir que su ayuda se reparta entre el resto de disciplinas, también evita la auditoria de sus cuentas.

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Entre los casos más sonados está el del inhabilitado presidente de la Federación de Tenis, José Luis Escañuela, cuya gestión recibió críticas de los jugadores, entrenadores y la afición. En 2015, el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) acordó suspenderle en el ejercicio de sus funciones por su negativa a facilitar información para auditar las cuentas y el desvío sospechoso de cerca de 600.000 euros. De hecho, el presidente de Consejo Superior de Deportes (CSD), Miguel Cardenal, señaló, durante una comparecencia pública en los Cursos de Verano del Escorial en 2015 que “lo que ha ocurrido, salvo que demuestren lo contrario, es un escándalo como pocos se recuerdan. Aproximadamente el 15% del presupuesto se destinaba al tenis”.

La confirmación de su mala gestión la otorgaron los tenistas españoles, entre ellos Rafael Nadal, David Ferrer, Garbiñe Muguruza o Carla Suárez, que firmaron una carta denunciando “el liderazgo caótico y beligerante” actitud Escañuela. No es el único escándalo que salpica su gestión. También se le abrió un expediente por irregularidades en el proceso electoral que lo aupó a ese cargo en 2012.Lorenzo Miret, Tiro con arco

Las denuncias de manipulación electoral para aferrarse al cargo están a la orden del día en las federaciones. Lorenzo Miret Alfonso, expresidente de la Federación de Tiro, que permaneció en su cargo 14 años, fue reelegido por última vez en julio de 2013, después de un proceso electoral que se retrasó durante meses, ya que su convocatoria inicial fue considerada nula por la Junta de Garantías Electorales.

Además, en 2014, el TAD acordó inhabilitarle como consecuencia de "la incorrecta utilización de los fondos privados o de las subvenciones, créditos, avales y demás ayudas del Estado". El TAD mencionaba en su resolución "la utilización indebida de un piso alquilado por la federación, un vehículo adquirido para fines ajenos al cargo por parte del presidente, el coste de un teléfono móvil para uso particular, así como la incorrecta liquidación de gastos de viajes, dietas, manutención...”Baloncesto y Rugby

Otra gestión salpicada por el despilfarro es la de José Luis Sáez, expresidente de la Federación Española de Baloncesto (FEB) quien abandonó su cargo después de que TAD le abriera un expediente disciplinario por falta "muy grave" por una supuesta utilización particular del presupuesto de la Federación de Baloncesto. También en el punto de mira está Javier González Cancho, expresidente de la Federación de Rugby, dimitió por la "incorrecta gestión y control del gasto de 2013". Oficialmente se excedió en 211.400 euros, pero hay un millón y medio de euros que no aparecen justificados en los presupuestos.

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