El portavoz de Guterres, Stéphane Dujarric, ha destacado que el secretario general de la ONU ha dado las gracias a los miembros del Consejo de Seguridad y del Grupo Internacional de Apoyo a Siria por su presencia en el encuentro.
Asimismo, ha pedido a aquellos que han aceptado la invitación para participar en la cumbre en la localidad suiza de Ginebra que "lo hagan de buena fe", reconociendo que "lograr progresos no será fácil".
En este sentido, Guterres ha manifestado que "sólo una solución política puede lograr la paz en Siria", al tiempo que ha agregado que "todos los sirios comprometidos con este objetivo deben redoblar sus esfuerzos por la paz".
Durante la inauguración de la cumbre, el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, ha pedido a los presentes que "trabajen juntos".
"Sé que no va a ser fácil terminar este horrible conflicto y sentar las bases de un país en paz consigo mismo, soberano y unido", ha resaltado.
"El pueblo sirio quiere desesperadamente un fin al conflicto. Todos lo sabéis, y lo sabéis muy bien: habéis sido los primeros en decírmelo", ha dicho De Mistura, quien ha añadido que la población "espera un alivio a su sufrimiento y el sueño de un nuevo camino para salir de esta pesadilla y lograr un futuro real y normal con dignidad".
Así, ha insistido en que "no hay solución militar" al conflicto, argumentando que "esto ha sido así durante estos seis horribles años (...), sigue siendo cierto a día de hoy, y seguirá siendo cierto mañana".
De Mistura ha prometido además "hacer todo lo posible" para "promover la participación total y efectiva de las mujeres en los esfuerzos (de paz)", pidiendo a los participantes "que tengan en mente los intereses de Siria y de su pueblo".
"Es una responsabilidad histórica no condenar el futuro de generaciones de niños sirios a largos años de conflicto agrio y sangriento y dejar de ver cómo continúan las violaciones masivas de los Derechos Humanos, la huida de sirios de sus viviendas y su patria, y la expansión del terrorismo", ha destacado.
"No olvidemos que el conflicto a creado un ambiente terrible en la región y a nivel internacional en general", ha dicho, destacando la presencia de miembros del Consejo de Seguridad de la ONU y del Grupo Internacional de Apoyo a Siria.
"Su presencia simboliza el deseo de la comunidad internacional de ver cómo el conflicto en Siria llega finalmente a su fin a través de una solución política negociada", ha valorado, expresando el apoyo de Naciones Unidas a estos esfuerzos.
Por último, ha destacado la importancia de los encuentros celebrados en las últimas semanas en la capital de Kazajistán, Astaná, y el alto el fuego pactado en diciembre con mediación de Rusia, Turquía e Irán. "Es frágil, pero está ahí, y no habíamos tenido uno en muchos meses", ha argumentado.
Después del discurso inaugural, pronunciado con horas de retraso, el mediador ha estrechado las manos de los representantes de ambas partes, que abandonaron la sala para proseguir con el diálogo. Los organizadores no han aclarado si serán conversaciones directas o indirectas.
La delegación del Gobierno está encabezada por el embajador sirio en Naciones Unidas, Bashar al Yaafari. El equipo opositor, por su parte, está liderado por Naser al Hariri, del Alto Comité para las Negociaciones (ACN).
Es la cuarta vez desde que comenzó la guerra siria, en marzo 2011, que las partes se reúnen para intentar pactar una solución política.
La última tentativa tuvo lugar hace justo un año, pero colapsó por la ofensiva militar de las tropas del Gobierno de Bashar al Assad contra las zonas de la localidad de Alepo controladas por los rebeldes.
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