Liberado en Etiopía un destacado bloguero y activista detenido hace más de un mes

Befeqadu, miembro del grupo de blogueros Zona 9, fue una de las miles de personas arrestadas por las fuerzas de seguridad en el marco del estado de emergencia impuesto el 9 de octubre.

Su liberación ha tenido lugar en el marco de la excarcelación de alrededor de 10.000 personas, anunciada el miércoles por las autoridades, según ha informado la cadena de televisión británica BBC.

Befeqadu, de 36 años, ya fue arrestado en abril de 2014 junto a otros nueve blogueros y periodistas, e imputado por crímenes de terrorismo, si bien los cargos fueron retirados 18 meses más tarde.

En declaraciones a la citada cadena, el bloguero ha expresado su satisfacción por su liberación, afirmando que se encuentra "un poco exhausto, frustrado y asustado". "Creo que estoy bien, y volveré a la normalidad pronto, espero", ha agregado.

"Estábamos lejos de nuestros padres, la comida no era buena y no sabíamos cuándo nos iban a liberar, si es que iban a hacerlo. Teníamos miedo especialmente por la incertidumbre y las altas temperaturas, que lo han hecho muy difícil", ha manifestado.

Sin embargo, Befeqadu ha asegurado que, si bien se tomará "un tiempo sin una participación activa", seguirá "escribiendo y haciendo comentarios". "Quizá me lleve una semana o dos", ha remachado.

Las autoridades etíopes declararon el 9 de octubre el estado de emergencia en respuesta a las protestas de la comunidad oromo, aplicando unas restricciones que han alarmado a numerosas ONG internacionales.

El Gobierno etíope ha acusado a varios países de armar, entrenar y financiar a los participantes en las protestas del pueblo oromo contra las expropiaciones de tierras en los alrededores de la capital, Addis Abeba.

En concreto, el portavoz gubernamental, Getachew Reda, señaló a Eritrea, que mantiene una larga disputa fronteriza con Etiopía, y a Egipto, también enfrentado a las autoridades etíopes por la gestión de las aguas del río Nilo.

Más de mil integrantes de la comunidad Oromo han muerto en las regiones de Oromia y Amhara en los últimos 11 meses, durante los que han sido objeto del acoso sistemático de las fuerzas de seguridad, según denuncian ONG como Human Rights Watch.

Las protestas comenzaron tras la publicación de un informe de HRW sobre la situación en el país, lo que a su vez provocó una respuesta violenta de la Policía.

A principios de octubre, al menos 55 personas murieron en una estampida en la región de Oromiya provocada por el lanzamiento de gas lacrimógeno y tiros al aire por parte de la Policía para reprimir una manifestación crítica con el Gobierno.