La ONU alerta sobre el aumento de las tensiones étnicas y la violencia entre milicias en Burundi

  • El Alto Comisionado para los Derechos Humanos de Naciones Unidas, Zeid Raad al Hussein, ha expresado su preocupación la "campaña de miedo y terror" que están sembrando las milicias rivales en Burundi, donde las tensiones étnicas han dejado tras de sí decenas de cuerpos sin identificar en las últimas semanas.
EUROPA PRESS
EUROPA PRESS

Al Hussein ha urgido a las autoridades burundesas en un comunicado que pongan fin a la impunidad de la milicia Imbonerakure, relacionada con el Gobierno. De acuerdo con los datos de la ONU, decenas de cuerpos sin identificar han aparecido a largo del país en las últimas semanas y se ha registrado un aumento de las torturas, redadas y ataques por parte de las milicias rivales.

En el comunicado, Zeid ha mostrado su preocupación ante el aumento del número de desaparecidos y de cadáveres encontrados. También ha instado a las autoridades a poner fin a las crecientes tensiones sociales que se viven el país.

El Alto Comisionado ha puesto como ejemplo un vídeo que se ha vuelto viral en Burundi en los último días, en el que miembros jóvenes de la milicia entonaban una canción popular en la que instaban a violar a las mujeres del grupo rival. La milicia Imbonerakure forma parte de las juventudes del partido CNDD-FDD, liderado por el presidente burundés, Pierre Nkurunziza.

La canción se ha escuchado en numerosas encuentros del grupo y manifestaciones pacíficas en algunas de las principales ciudades. No obstante, según Zeid, los cánticos incitando a la violencia forman parte de una "campaña de miedo y terror" orquestada por la milicia en el país, donde las víctimas son escogidas en función de su etnia.

"Los grotescos cánticos de violación por parte de los jóvenes de la milicia Imbonerakure en muchos puntos del país resultan extremadamente alarmantes, particularmente porque confirman las informaciones que nos llegan por parte de aquellos que se han visto obligados a huir del país: que hay una campaña de miedo y terror organizada por esta milicia", ha explicado Zeid.

Burundi se vio sumergido en una grave crisis en abril de 2015, cuando el presidente anunció su decisión de presentarse por tercera vez a las elecciones. La oposición rechazó la medida, ya que alegaban que era inconstitucional y que violaba el acuerdo de paz que acabó con la violencia en 2005.

Nkurunziza hizo caso omiso de las acusaciones, volvió a presentarse y ganó las elecciones, lo que provocó enormes disturbios y enfrentamientos entre sus seguidores y detractores.

Al menos 450 personas han perdido la vida a causa de estos enfrentamientos desde entonces. Se estima que más de 400.000 burundeses han tenido que huir a países vecinos, de acuerdo con organizaciones por los Derechos Humanos.

El país tiene prácticamente la misma mezcla de etnias que su país vecino, Ruanda, que en 1994 presenció uno de los peores genocidios étnicos de la historia. La mayor parte de la población está conformada por hutus y cuenta con una minoría tutsi.

Mostrar comentarios