En un discurso durante el Foro de Liderazgo de la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés), Trump ha renovado sus promesas de campaña recordando la postura de su predecesor, Barack Obama, favorable a una regulación para ejercer un mayor control sobre la posesión de armas.
En esta intervención, el presidente ha reivindicado su victoria en las elecciones del pasado 8 de noviembre, señalando que gracias a ella Estados Unidos verá el final de un "asalto de ocho años" contra el derecho a portar armas, en referencia a los ocho años de mandato de Obama.
"Tenéis a un verdadero amigo y a un campeón en la Casa Blanca", ha señalado, ante los asistentes al acto. "Desde ahora, ninguna agencia federal perseguirá a los propietarios de armas que respetan la ley", ha expresado.
En la misma línea, ha subrayado que el Gobierno "ya no socavará" sus "derechos y libertades como estadounidenses". "En lugar de eso, trabajaremos con vosotros, a vuestro lado", ha matizado.
Durante sus dos períodos en la Casa Blanca, Obama ha defendido la necesidad de reforzar la legislación sobre armas de fuego, especialmente desde que tuvo lugar la masacre de la Escuela Primaria de Sandy Hook, en Newton (Connecticut), en la que murieron 28 personas.
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