Oxfam en Colombia pide que cese la violencia contra líderes sociales en Colombia tras un nuevo asesinato

  • La organización de Oxfam Internacional en Colombia ha pedido que pare "ya" la "violencia contra los líderes sociales y activistas", después de conocer la muerte de la líder de Derechos Humanos del municipio de Yarumal, Luz Herminia Olarte Piedrahíta, cuyo cadáver apareció el pasado 5 de febrero.
EUROPA PRESS

"La violencia contra los líderes sociales y activistas debe parar ya. Es hora de que los gobiernos actúen", ha señalado la organización a través de su cuenta oficial de la red social Twitter.

El cuerpo de Olarte Piedrahíta, de 51 años, apareció semienterrado en una zona boscosa de Las Cruces, en el departamento de Antioquia, cubierto de ramas. Según fuentes cercanas a la activista recogidas por 'El Colombiano', fue agredida con un machete.

El Proceso Social de Garantías a la Labor de los y las defensores de derechos humanos de Antioquia ha condenado su asesinato y ha señalado que "a pesar de los recurrentes informes del Sistema de Alertas Tempranas de la Defensoría, así como el control y avance de los grupos neoparamilitares a zonas estratégicas de las subregiones de Antioquia, no existen medidas efectivas del Estado para repeler, reducir, desarticular o someter a estos grupos".

Con la muerte de Olarte Piedrahíta ya son cinco los líderes sociales asesinados en el departamento de Antioquia en lo que va de año, y un total de 19 en todo el país desde el pasado 1 de diciembre.

La semana pasada el presidente del país, Juan Manuel Santos, se comprometió evitar que las "amenazas contra los líderes sociales" empañen el "clima de paz" que existe en el país tras la firma del acuerdo con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que está entrando en la fase de desarme de los guerrilleros.

"Cualquier asesinato nos duele", aseguró el mandatario a través de un comentario publicado en Twitter. "Estamos trabajando con la Fiscalía y con la Fuerza Pública para proteger a los líderes sociales y esclarecer las denuncias", añadió.

Las declaraciones de Santos llegaban una semana después de la muerte de Porfirio Jaramillo, un líder campesino de la región del Urabá, ubicada a unos 100 kilómetros al norte de la ciudad de Medellín, asesinado presuntamente por miembros del clan del Golfo días atrás, tal y como anunció el viceministro del Interior, Guillermo Rivera.

El pasado mes de noviembre, la Misión de Naciones Unidas en Colombia y el equipo de la ONU en el país ya subrayaron la necesidad de proteger a los civiles y construir una "armonía comunitaria" en el país, mostrando su preocupación por la reciente ola de violencia que se ha registrado contra líderes sociales en varias áreas afectadas por el conflicto con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

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