Estas son las 10 señales para reconocer a un yihadista

  • El Observatorio Internacional de Estudios sobre Terrorismo ha lanzado una campaña en las redes sociales en la que explica las señales para reconocer a posibles radicales.

    Desconfiar de los antiguos amigos o cambiar de hábitos alimenticios son algunas de ellas.

Estos son las 10 señales para reconocer a un yihadista
Estos son las 10 señales para reconocer a un yihadista
Bárbara Barón

El Observatorio Internacional de Estudios sobre Terrorismo (OIET), uno de los principales organismos especializados en España yihadismo, ha lanzado una campaña en las redes sociales en la que explica las señales para reconocer a posibles activistas radicales islamistas en España.Desconfía de los antiguos amigos porque los considera 'impuros'

Cuando un joven entra en la órbita de los grupos yihadistas reduce al mínimo sus relaciones sociales, que prácticamente se limitan al contacto con los individuos encargados de su proceso de adoctrinamiento.

En este sentido, suele dejar de lado a los amigos y limita sus relaciones sociales a aquellas personas que comparten su punto de vista radical. Divide a los musulmanes en dos categorías: una primera de ‘buenos musulmanes’ y, por tanto, ‘hermanos’ (los que comparten su interpretación desviada), y una segunda más amplia que va desde los ‘musulmanes tibios’ a los ‘extraviados’, ‘incrédulos’, ‘hipócritas’ y ‘apóstatas’.Muestra rechazo hacia los miembros de su familia

Se producen tensiones o cambios en el comportamiento familiar. El joven que experimenta la deriva radical procura que el entorno familiar se adapte a sus nuevas creencias, promoviendo lo que él considera correcto y prohibiendo lo que estima equivocado.

En el caso de estar casado, suele obligar a su mujer e hijas a que se tapen prácticamente todo el cuerpo cuando salen de casa y procura que no salgan a la calle si no van acompañadas por él o por un familiar cercano.

Además, puede llegar a romper la relación con los familiares que no compartan sus puntos de vista.Cambia radicalmente sus hábitos alimentarios

Los radicalizados comen únicamente alimentos halal y, en muchas ocasiones, pierden bastante peso. Así, algunos de estos individuos practican con más frecuencia el ayuno voluntario.

Por ejemplo, dos implicados en la trama del 11-M, Serhane Abdelmajid ‘el tunecino’ y Moutaz Almallah Dabas hacían ayuno todos los lunes y jueves del año.

También es frecuente que ayunen seis días más en el mes de Chawal (el que sigue inmediatamente al Ramadán).Cambia su forma de vestir por ropa que oculta el cuerpo

Cuando alguien está en un proceso de fanatización, sobre todo en el caso de las mujeres, una de las primeras señales es el cambio de vestimenta.

La chica deja de utilizar ropa occidental, para pasar a cubrirse la cabeza con un pañuelo e incluso utilizar el niqab, que solo deja a la vista sus ojos. Además, dejará de maquillarse.

En el caso de los hombres, suelen emplear lo que considera vestimenta tradicional islámica: chilaba o pantalones muy amplios y el gorro típico o turbante y procura que los pantalones cubran justo por encima de los tobillos.Deja sus estudios porque la enseñanza forma parte del 'complot'

Los radicales consideran que occidente está pervirtiendo a los niños en las escuelas, enseñando cosas inapropiadas y contrarias al Islam. Individuos muy radicalizados han llegado a abandonar los estudios, sobre todo si acudían a aulas mixtas.No escucha música porque le distrae y le devía de su 'misión'

Según la fatwa del Sheik Muhammad Ibn Uzaymin, "el Islam prohíbe la música, porque ella desvía el corazón, le penetra y le distrae de la invocación de Allah. Y el hombre ha sido creado para adorar a Allah, así que si su corazón está prendado de la música, ella le desviará del recuerdo de Allah. Es por esta razón que se ve al apasionado de la música y de las canciones, moverse y tocar con su mano así ... como si él estuviera tocando la música, porque su corazón y su mente están invadidos por la música. Y el Islam espera que sus seguidores estén continuamente dirigidos hacia Allah, porque es así como ellos mejorarán y alcanzarán la felicidad"No ve la televisión para evitar imágenes que considera prohibidas

Los islamistas prestan una atención escrupulosa a lo permitido (halal) y lo prohibido (haram). Es muy común que el individuo en vías de radicalización no entre en establecimientos donde se vendan o consuman bebidas alcohólicas; no practique juegos de azar, no vaya al cine, salas de fiesta o a otro tipo de espectáculos públicos.Abandona actividades deportivas porque son mixtas

Los radicalizados limitan al máximo su contacto con mujeres fuera del ámbito familiar. Ese fue el caso, por ejemplo, de Mohamed Bouyeri, un joven holandés de origen marroquí, que asesinó a Theo Van Gogh en noviembre de 2004.

A medida que se intensificó su radicalización, Bouyeri empezó a disuardir a las mujeres para que no asistieran a las actividades que organizaba un centro en el que trabajaba de voluntario. Finalmente terminó abandonando el centro.Rechaza cualquier tipo de autoridad

En caso de que la persona se encuentre integrada en un grupo yihadista, cualquier práctica habitual pasará el control previo del líder ideológico. Son muy frecuentes las consultas sobre el carácter permitido o prohibido sobre los asuntos más insignificantes.

Todo queda supeditado a la opinión del 'líder' y rechazan a cualquier otra autoridad, ya sea estatal, familiar, laboral...Visita habitualmente sitios web y redes sociales extremistas

Es otra de las pruebas definitivas de que una persona ha sido captada por alguna red islamista.

El afectado se pasa horas viendo vídeos de la yihad, muchos de ellos de un contenido muy violento, es asiduo asimismo a las páginas y redes utilizadas por los terroristas para su propaganda y, por supuesto, rechaza de forma radical ver cualquier canal de una televisión comercial de Occidente.

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