Cinco consejos para saber elegir la mejor tarifa de móvil

El mercado español de telefonía móvil cuenta con unas 500 tarifas. Una gama muy amplia que puede llegar a confundir a los usuarios y a gastar más dinero del necesario.

Según los datos MÁSMóvil, los españoles pagan, de media, 140 euros anuales de más en su factura de teléfono por no buscar la mejor oferta.

La propia CMT señala que la media de los usuarios en el mercado español habla 163 minutos al mes y necesita 150MB para navegar. Unas cifras muy inferiores a las que ofrecen las tarifas medias de la mayoría de los operadores.

Para evitar pagar más por menos, el citado operador virtual ha diseñado una guía para que los clientes encuentren la oferta más adecuada para su móvil:

1. Identifica el consumo y el gasto actual

Lo primero que debe hacer un cliente antes de contratar una oferta es saber cuánto consume. Es decir, tener claro cuántos minutos habla, cuál es la duración media de sus llamadas, cuántos SMS y MMS envía, y cuánto navega por internet. Con todos estos datos determina el perfil de uso que hace de su móvil.

Junto a estos factores, también debe analizar cuánto dinero paga cada mes para así fijar el límite de un posible consumo mínimo. Es decir, si se suele gastar 45 euros, no es recomendable contratar una tarifa que cueste 30 euros.

2. Usar un comparador online de tarifas

Una vez que el cliente conoce sus gastos y sus necesidades, ya puede comparar las diferentes ofertas del mercado. Y hay muchas herramientas disponibles. Por ejemplo, la web doctorSIM.com o la de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).

También están las herramientas de los propios operadores y hasta aplicaciones móviles que chequean todas las ofertas del mercado.

Una de ellas es MyPlan de Geeksphone, que es gratuita y solo está disponible para los dispositivos Android, el sistema operativo de Google.

3. Comparar siempre las tarifas similares

El tercer consejo es que, cuando el usuario examine las ofertas debe seguir siempre el mismo patrón. Por ejemplo, si lo que prima es el precio por minuto, ése deberá ser el factor que analice en las distintas ofertas.

Además de este parámetro, el cliente puede centrarse en otros como el establecimiento de llamada (es decir, el coste fijo que se paga cada vez que llama), el horario, los destinos (nacionales o internacionales, móviles o fijos…) o el consumo fijo.

4. Mirar con lupa las tarifas planas y los paquetes de tarifas

Aunque las tarifas planas se han popularizado en los últimos meses, no siempre son la mejor opción para los clientes. "Es difícil que se adapten al perfil del usuario y gran parte de éstos acaben pagando por aquello que no utilizan. Además, la mayoría lleva letra pequeña sobre destinos, horarios, tipos de llamadas…", asegura un portavoz de MÁSMóvil.

Las tarifas planas permiten a un operador garantizarse unos ingresos concretos cada mes, porque es un paquete cerrado, no como las ofertas por minutos, donde éstos dependen de lo que llame el cliente. De ahí que se hayan convertido en una fórmula muy utilizada por todas las compañías.

Según calcula la CMT, hoy en día hay cerca de 13,5 millones de contratos de este tipo de ofertas, una cifra que seguirá subiendo a lo largo de este ejercicio.

5. Evitar la obligación de permanencia

Se trata de una de las mejores bazas de los grandes operadores (como Movistar y Vodafone), que usan la excusa de subvencionar teléfonos a cambio de que el usuario se comprometa a estar un periodo de tiempo con la compañía.

Lo habitual es que exijan una permanencia de entre 18 y 24 meses; es decir, entre un año y medio y dos años. Un contrato que no siempre compensa al cliente.

¿Los motivos? No podrá cambiar de tarifa cuando quiera y deberá pagar una penalización si decide irse con otro operador antes de la fecha que ha firmado con su compañía.