Desde octubre de 2016 hasta este mes de mayo augura la convocatoria de unas 367 plazas, de las que ya se han convocado 38, según la documentación consultada por Europa Press.
Añade que a estos puestos pueden optar los 277 trabajadores de las oficinas liquidadoras de los registradores de la propiedad --cuyas funciones prevé asumir la ATC el 1 de septiembre-- "siempre que reúnan los requisitos previstos en la normativa de la función pública".
Precisamente los registradores han presentado esta semana un recurso contencioso administrativo contra la Generalitat por avanzar del 30 de octubre al 1 de septiembre la finalización del convenio por el que se encargan de la liquidación de impuestos cedidos como son el de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados y el de Sucesiones y Donaciones.
Los registradores han indicado a Europa Press que quieren colaborar con la Generalitat en la transición para que la ATC realice directamente estas funciones, pero argumentan que la fecha del 1 de septiembre es insuficiente para realizar el traspaso correctamente.
La ATC ya asumió el 1 de enero otra tarea que hasta entonces tenía encargada a los registradores: la grabación y digitalización de documentación fiscal, y ha incorporado a 15 trabajadores de los antiguos empleados como interinos mediante concurso con un coste de 281.024 euros, según los datos remitidos al Parlament.
Respecto al coste anual del despliegue territorial de la ATC, es de casi 11,7 millones de euros, incluyendo los gastos de funcionamiento y de personal y la amortización de la inversión inicial de las oficinas.
La inversión estimada para la implantación de las 15 nuevas oficinas territoriales propias de la ATC es de 6,32 millones.
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