Livinio Stuyck rechaza entregar las llaves de su vivienda en la Real Fábrica de Tapices y ofrece pagar rentas pendientes

Además, la familia Stuyck asegura que no ha tenido interlocutores para formalizar el pago de las rentas por residir en la vivienda y achaca la situación a los diversos cambios de titularidad del edificio, para añadir que ha solicitado al Ministerio de Educación y Cultura la apertura de una cuenta para abonar "el pago las rentas debidas, lo que ha sido expresamente rechazado por la actual administración titular del inmueble".

Así lo han detallado una vez que este martes se haya reunido con representantes del Ministerio de Educación y Cultura después del requerimiento formulado ante Livinio Stuyck, puesto que este departamento entiende que reside de forma irregular en el edificio (de titularidad pública) al no pagar alquiler ni los gastos asociados a las vivienda.

El antiguo propietario de la Real Fábrica de Tapices ha atendido este requerimiento y ha expresado que no piensa entregar las llaves del inmueble.

Por otro lado, la familia Stuyck detalla es que "totalmente falso" que no se haya pagado la electricidad o el agua consumida y sostienen que desde hace años "ya no se reciben facturas, incluso habiéndolo solicitado".

Al respecto, recalcan que existen contadores de electricidad y agua instalados en el edificio pero añaden que la Fundación de la Real Fábrica de Tapices "dejó de emitir las facturas imposibilitando el pago al no enviar un recibo o una justificación". "La Fundación no quiere que paguemos los consumos", aseveran desde la familia.

También manifiestan que "todas las generaciones de la familia Stuyck han pagado en diferentes conceptos por utilizar las instalaciones del edificio".

"En la situación actual y exclusivamente motivado por los distintos cambios del titular del inmueble, la familia Stuyck no ha tenido interlocutor posible para realizar el pago de las rentas", agregan para a continuación enfatizar en que están "completamente de acuerdo en el pago del alquiler exigible, pero no existe voluntad de recibir las cantidades por parte del Ministerio de Cultura".

Por otro lado, recalcan que el proceso abierto "no es un desalojo ni un desahucio" y que Livinio Stuyck tiene un contrato de arrendamiento "válido y es necesaria una sentencia judicial para proceder al lanzamiento". "En el presente caso, no existe un procedimiento judicial abierto, ni resolución firme alguna", afirma la familia Stuyck.

Además, recalcan que el Ministerio de Cultura, Ayuntamiento de Madrid, Comunidad de Madrid y Patrimonio del Estado "conocen y han reconocido el derecho a la vivienda de la familia Stuyck" desde la creación de la Fundación para la Real Fábrica de Tapices. En este punto, sostienen que "existen innumerables documentos, actas y comunicaciones que así lo acreditan".

Durante los últimos años, insiste la familia Stuyck, incluso han tenido lugar intentos "poco formales" de negociación, incluyendo valoraciones inmobiliarias hechas por empresas profesionales del sector pero "sin terminar de formalizar nunca".

Finalmente, la familia Stuyck apunta a que la creación de esta fundación "no produjo modificación del estatuto legal del inmueble, ni de las dependencias ocupadas por el organismo ni de la vivienda habitual de la familia Stuyck".