El precio de la vivienda de segunda mano en La Rioja crece un 0,6% durante el segundo trimestre del año

Según la evolución trimestral en la ciudad de Logroño, el precio ha subido un 0,4 por ciento y se sitúa en 1.278 euros/m2. La mayor subida se ha producido en Ezcaray, donde los propietarios piden un 2,2 por ciento más que hace tres meses, seguida por el incremento de Haro (1,2 por ciento). Calahorra ha sido, en cambio, el municipio en el que más cayeron los precios (-6,6 por ciento), seguido por Lardero (-3,3 por ciento) y Villamediana de Iregua (-1,9 por ciento).

Ezcaray es una vez más el mercado más exclusivo de La Rioja, sus 1.403 euros/m2 marcan el techo de la comunidad. Le siguen Logroño (1.278 euros/m2) y Lardero (1.180 euros/m2). Calahorra, en cambio, es el mercado más económico: 751 euros/m2.

LOS PRECIOS SUBEN EN ESPAÑA

El precio de la vivienda de segunda mano en España ha terminado la primavera con una subida del 2,7 por ciento. El metro cuadrado crece hasta los 1.554 euros desde los 1.513 euros a los que se cotizaba hace tres meses. En el cómputo interanual la subida es del 1,5 por ciento.

El informe del segundo trimestre de 2017 mantiene las diferentes velocidades a las que evoluciona el sector inmobiliario en España: con crecimientos generalizados en los grandes mercados y con ajustes en núcleos de población sin interés por parte de la demanda.

Si atendemos a las Comunidades Autónomas, sólo Navarra, Extremadura y Galicia han visto cómo su precio caía, en Cantabria no se han movido y en las 13 comunidades restantes los precios han aumentado. 37 provincias y 28 capitales consiguen cerrar el trimestre en positivo.

La ciudad de Barcelona registra una subida del 3,2 por ciento, hasta dejar el precio del metro cuadrado en 4.253 euros. Si atendemos al dato interanual, los precio en la ciudad condal han crecido un 20,4 por ciento en los últimos 12 meses. Aun así, los precios siguen un 10,1 por ciento más bajos que hace 10 años, cuando explotó la burbuja inmobiliaria.

Madrid termina el segundo cuarto del año con una subida en el precio de la vivienda usada del 4,4 por ciento, lo que sitúa el precio del metro cuadrado en la capital en 3.047 euros. En el interanual, el incremento es del 6,3 por ciento. El descenso acumulado en la última década es del 24,5 por ciento.

También Valencia aumenta las expectativas de los propietarios de viviendas en venta. El crecimiento del 3,6 por ciento durante los tres últimos meses ha dejado el precio del metro cuadrado en 1.594 euros. Este precio está un 7,3 por ciento por encima que el que se registró en la ciudad hace doce meses. La caída acumulada desde el estallido es del 43,1 por ciento.

En Málaga los precios han crecido un 4,2 por ciento, mientras que el crecimiento ha sido del 1,1 por ciento en Valladolid. El resto de grandes mercados españoles registra ascensos inferiores al uno por ciento en sus precios: 0,8 por ciento en Bilbao, Sevilla un 0,4 por ciento y Zaragoza un 0,3 por ciento.

La mayor subida registrada por una capital se ha producido en Palma (8,6 por ciento), seguida por Castellón (4,5 por ciento) y Las Palmas de Gran Canaria (4 por ciento). Por el contrario, Huesca y León han sido las capitales de provincia más castigadas por las caídas de los precios y sus propietarios han tenido que bajar un 4,2 por ciento y 3,9 por ciento respectivamente. Le siguen Ávila (-3,7 por ciento), Jaén (-2,7 por ciento) y Soria (-2,3 por ciento).

Para Fernando Encinar, jefe de estudios de idealista, "los datos del informe de idealista son positivos para el sector. El precio de la vivienda sube en todo el territorio estatal en tasa interanual y trimestral. El mapa de España ha pasado del rojo al negro en el último año. Este incremento en los precios de venta está acompañado por un crecimiento en la concesión de hipotecas y en el número de operaciones cerradas. Aunque, tal y como venimos diciendo más de un año, la normalización se está produciendo a dos velocidades, hay que destacar que las distancias se van acortando y son cada vez más los municipios españoles que se acercan a su punto de equilibrio".

Encinar asegura que "a pesar de los crecimientos en algunos mercados, los precios de la vivienda continúan por debajo del nivel alcanzado hace una década y en la actualidad no se dan los factores que pudieran hacer temer otra burbuja".