Zapatero permite a Cataluña lo que prohíbe a Madrid

  • Habrá quien vea intereses electorales detrás, mientras otros dirán que no son casos comparables. Pero la realidad es que mientras el Gobierno va a permitir a Cataluña seguir endeudándose, otras comunidades tienen vetado el acceso al mercado; mientras que algunos consistorios, como el Ayuntamiento de Madrid, ni siquiera han conseguido permiso para refinanciar su deuda.
R.U.

Habrá quien vea intereses electorales detrás, mientras otros dirán que no son casos comparables. Pero la realidad es que mientras el Gobierno va a permitir a Cataluña seguir endeudándose, otras comunidades tienen vetado el acceso al mercado; mientras que algunos consistorios, como el Ayuntamiento de Madrid, ni siquiera han conseguido permiso para refinanciar su deuda.

Este doble rasero no ha tardado en levantar ampollas entre algunos militantes del Partido Popular (PP). El primero en levantar la voz ha sido el diputado por Murcia Vicente Martínez Pujalte, quien ayer criticó el diferente trato dado por el Ejecutivo a su región frente a la catalana.

"Los murcianos tienen el derecho a tener los mismos servicios educativos y sanitarios que los catalanes", señaló el político en un comunicado, en el que también adelantaba que su formación va a presentar varias iniciativas parlamentarias.

Artur Mas arrancó ayer al presidente del Gobiero, José Luís Rodríguez Zapatero, el compromiso de poder endeudarse en otros 2.000 o 2.500 millones de euros, operación que prevé llevar a cabo en las próximas semana, además de haber desbloqueado el pago de 759 millones para infraestructuras.

Este visto bueno contrasta, por ejemplo, con la negativa del Gobierno a la petición del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, que el pasado noviembre solicitó poder refinanciar la deuda del Consistorio, que vencía el 31 de diciembre.

Ante esta situación, que ponía en jaque incluso el pago a proveedores, el Ejecutivo de la capital recurrió a la venta del 51% de la sociedad Mecamadrid, participación que valoró en 190 millones de euros.

Las comunidades de Cataluña y Murcia, así como el Ayuntamiento de Madrid, tienen en común su disparado endeudamiento. Aunque la región ahora gobernada por Artur Mas consiguió aprobar el examen de déficti del Ministerio de Economía, que supendieron Castilla-La Mancha y Murcia, tiene un disparado ratio de deuda sobre PIB, que llega al 15,4%, frente al 7,4% murciano.

Madrid, con unos compromisos financieros de 7.000 millones de euros, es el consistorio más endeudado de toda España, tanto en términos absolutos como en deuda por habitante.

El plan de control del déficit impuesto por el Gobierno a comunidades y ayuntamientos para cumplir con los requisitos de Bruselas han llevado al Gobierno a poner coto al acceso de las regiones a los mercados, además de haberles arrancados diversos compromisos de ahorro y ajustes presupuestarios.

El ejecutivo catalán, por ejemplo, ultima un Plan de Estabilidad que supondrá una reducción del 10% del gasto público.

"El actual gobierno de la Generalitat puede trasmitir confianza, somos gente seria que cumple con sus compromisos y deberes. Estamos dispuestos a ello, pero eso requiere contrapartidas. Debe haber franca colaboración entre el Gobierno central y la Generalitat y en eso estamos", ha afirmado Mas

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