Goirigolzarri se va inesperadamente de BBVA

Es el mejor ejecutivo de la liga bancaria. Lo reconocen entre bancos y cajas de ahorros rivales. Pero se va de BBVA de forma inesperada y a los 55 años de edad, en el momento más dulce de un banquero. Lo hará eso sí con tres millones de euros anuales bajo el brazo (hasta 52 millones en total), más la aportación correspondiente a 2009, con lo que podría rozar los 60 millones en total.

El consejo de administración de BBVA, reunido en la tarde del martes, ha decidido proponer la continuidad de Francisco González como presidente pese a que el próximo 17 de octubre cumplirá 65 años de edad, el límite ordinario de jubilación. Ese día quedará desactivado el blindaje que le protege de un cese -que supera los 90 millones de euros entre pensión e indemnización-.

El máximo órgano de gobierno del banco ha pedido a González que ponga en marcha un nuevo esquema organizativo y de gestión que permita avanzar con mayor celeridad hacia "un modelo de crecimiento, aún más innovador, más eficiente y con un mayor foco en el cliente".

FG representa un perfil de crecimiento, más agresivo, frente al perfil más conservador de Goirigolzarri. Se trata de un punto clave de la remodelación de BBVA, que ha reforzado su capital con la venta de inmuebles por valor de 1.000 millones de euros y una emisión de bonos convertibles en acciones por otros 2.000 millones.

Destino, ¿otro banco?

Ángel Cano, hasta ahora director de Recursos Humanos, será de forma temporal el nuevo consejero delegado del grupo en sustitución de José Ignacio Goirigolzarri, quien ha decidido dejar sus responsabilidades ejecutivas, "de mutuo acuerdo con la entidad", según la versión oficial del banco. "Tras ocho intensos años como consejero delegado y más de 30 al servicio del Grupo, ha llegado el momento de dar paso a un relevo generacional en la gestión del día a día del banco", explica el propio Goirigolzarri. (ver vídeo)

Sin embargo, fuentes conocedoras de la situación señalan que el banquero ha tomado la decisión de cesar en sus funciones al no producirse su esperado ascenso a la presidencia del segundo banco español y tercer banco de la zona euro por capitalización bursátil. Precisamente, este es uno de los peros recurrentes a la gestión tanto de González como de Goirigolzarri en los últimos años: su valor en bolsa es el mismo que en el año 2000, unos 50.000 millones de euros.

Son muchos los analistas que esperan operaciones de mayor calado por parte del banco de origen vasco, pese a que BBVA ha sido una de las escasas entidades en esquivar una ampliación de capital en estos dos años de crisis financieras. En cualquier caso, la decisión de BBVA ha causado "sorpresa mayúscula" en el sector financiero, debido a que se trata de uno de los ejecutivos más jóvenes y experimentados.

"Goirigolzarri tiene mucha carrera por delante", apuntaba una fuente del sector bien informada sobre el hecho, recordando los rumores de mercado que en 2007 le colocaron en Banco Santander como reemplazo de Alfredo Saenz, actual consejero delegado de la entidad, que ya cuenta con 67 años de edad, dos más que Francisco González, pero casi seis menos que el decano de los banqueros españoles, el presidente del Grupo Santander, Emilio Botín, que la semana que viene cumplirá 75 años.