La convulsión política de Italia amenaza la calma en los mercados

    • Las perspectivas de una crisis política en Italia antes de lo esperado probablemente impulsen los costes de financiación de Roma y las tensiones en la eurozona tras meses de calma.
    • Banqueros y analistas dicen que el mayor riesgo político es que Berlusconi pueda beneficiarse para volver al poder del creciente desencanto con las reformas estructurales de Monti.
La convulsión política empuja a Italia al centro de la crisis del euro
La convulsión política empuja a Italia al centro de la crisis del euro

Reuters

Las perspectivas de una crisis política en Italia antes de lo esperado, después de que el primer ministro Mario Monti dijera que pretende dimitir anticipadamente, probablemente impulsen los costes de financiación de Roma y las tensiones en la eurozona tras meses de calma en los mercados de bonos.

El anuncio sorpresa de Monti el sábado de que pretendía dimitir tras la aprobación de los presupuestos para el próximo año elevó la posibilidad de que se celebren elecciones en febrero, semanas antes de que concluya su mandato en abril, y reforzaron la incertidumbre sobre quién será su sucesor.

Banqueros y analistas dicen que el mayor riesgo político es que el ex primer ministro Silvio Berlusconi pueda beneficiarse para volver al poder del creciente desencanto con las reformas estructurales promulgadas por Monti.

"La principal preocupación entre los inversores no es la celebración anticipada de elecciones, sino el resultado de tal consulta", dijo Wolfango Piccoli, responsable de prácticas europeas en la firma de investigación de riesgos políticos Eurasia Group.

"Probablemente surja un parlamento fragmentado, llevando a la creación de un gobierno de coalición arreglado cuya capacidad de impulsar las reformas estructurales requeridas será seriamente limitado", añadió.

Berlusconi, cuya retirada de apoyo al Gobierno la semana pasada desató la crisis, ha anunciado ya que concurrirá en una plataforma que ataca las medidas de austeridad de Monti al que acusa de llevar a Italia a una espiral de recesión.

"A los mercados no les gustará probablemente el último movimiento de Berlusconi", dijo un destacado banquero italiano que pidió permanecer en el anonimato. "Una vuelta de Berlusconi sería un desastre para las finanzas de Italia y para la economía real".

El partido de centroderecha PDL de Berlusconi va por detrás del PD de centroizquierda en al menos 16 puntos porcentuales, según los sondeos de opinión, y también va rezagado frente al Movimiento 'antiestablishment' 5-Star, encabezado por el cómico Beppe Grillo, que ha ganado popularidad aglutinando la ira de la opinión pública hacia la clase política.

Pero el magnate de los medios ha dado la vuelta a las encuestas y es probable que use una retórica populista contraria al euro para conseguir apoyos y hacer más difícil que el centroizquierda consiga una mayoría clara.

AMENAZA POPULISTA

Antes incluso del anuncio de Monti, la retirada de apoyos del PDL impulsó la prima que los inversores exigen por el bono a diez años a 323 puntos frente al bono alemán el viernes, un dato que aún está lejos de los 533 puntos a que llegó en el punto más grave de la crisis el año pasado.

Otro destacado banquero italiano dijo que esperaba que el 'spread' subiera entre 80 y 150 puntos básicos el lunes en el bono a diez años.

Si ese nivel llegara al del año pasado, Italia tendría que pagar unos 45.000 millones de euros de intereses adicionales en su deuda pública de dos billones de euros, por no mencionar un mayor coste de financiación para compañías y prestamistas, dijo el banquero.

"Italia necesita la vuelta de Berlusconi como un agujero en la cabeza", dijo Nicholas Spiro, de Spiro Sovereign Strategy. "La mayor amenaza para Italia ahora mismo es el populismo".

Un incremento prolongado en el rendimiento de sus bonos podría alimentar los temores de la sostenibilidad de su deuda y podría dar al traste con las mejoras en la confianza del mercado a raíz de la promesa del BCE de comprar bonos.

Esto podría terminar afectando a España, que ha visto difuminados los rumores de la solicitud de un rescate a la UE.

"Sospecho que Italia afrontará una repetición de las presiones que afrontó a finales de 2011, cuando el rendimiento de su deuda se disparó a niveles insostenibles", dijo Raj Badiani, de IHS Global Insight.

Ni él ni varios destacados ejecutivos italianos descartaron otro gobierno tecnócrata, quizás encabezado de nuevo por Monti, en la segunda mitad de 2013 o que Italia pueda verse forzada a solicitar ayuda de la UE.

/Por Silvia Aloisi/

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