La economía alemana cerró 2011 con más fuerza de lo esperado. Y es que, tal y como publica el portal Bloomberg, el PIB germano cayó un 0,2% en el cuarto trimestre frente a los tres meses anteriores, cuando repuntó un 0,6%.
A pesar del descenso, el dato es mejor de lo esperado, ya que los expertos adelantaban un descenso del 0,3%. Esto significa que la primera economía del Viejo Continente ha mejorado en una décima las previsiones de los analistas de Bloomberg.
A pesar de esta contracción entre octubre y diciembre, Alemania saldó el pasado ejercicio con una expansión del 3%.
Entre los principales factores de la economía, la oficina de estadísticas germana (Destatis) destaca que el comercio exterior contribuyó al decrecimiento de la economía, mientras que el consumo también mostró un ligero descenso.
"Algunos indicadores dan razones para ser moderadamente optimistas", dice Stefan Muetze, economista de una entidad germana, quien explica que "estimamos una pequeña mejora en el arranque de este año. Y es que, aunque la crisis de deuda sigue siendo un riesgo, creemos que Europa lo podrá contener".
Francia crece un 0,2%
Por su parte, la economía francesa creció dos décimas en el cuarto trimestre respecto a los tres meses anteriores, cuando se expandió un 0,3%, lo que permitió cerrar 2011 con un crecimiento del 1,7%, tres décimas por encima de 2010, según los datos publicados por el Insituto Nacional de Estadística francés (Insee).
El consumo de los hogares franceses registró una ligera desaceleración en el último trimestre (+0,2% frente al +0,3%), mientras que la formación de capital fijo se aceleró (+0,9% frente a +0,2%). Asimismo, el comercio exterior tuvo una contribución positiva de siete décimas, frente al 0,1% del tercer trimestre.
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