La UE fijará un calendario para avanzar hacia la nueva arquitectura de la zona euro

EFE

La próxima cumbre de la Unión Europea (UE) fijará un calendario aproximado para avanzar en la nueva arquitectura de la zona euro que entre 2013 y 2014 prevé la coordinación de grandes reformas a nivel nacional, según el proyecto de conclusiones de esa reunión.

En ese documento igualmente se incluye la creación de "contratos" con incentivos para fomentar su aplicación y posteriormente un presupuesto propio pero limitado.

En el borrador de conclusiones del Consejo Europeo que se celebrará los próximos 13 y 14 de diciembre, establece una primera fase para lo que queda de año y 2013 que se centra en garantizar la sostenibilidad presupuestaria y el deseo de romper el vínculo entre la banca y la deuda soberana.

En este corto plazo, la prioridad es completar e implementar el marco legal para fortalecer la gobernanza económica, incluido el plan ("Six pack") que establece una fase preventiva y un brazo sancionador para el incumplimiento de los objetivos de deuda y déficit.

También incluye el denominado "two-pack", que establecerá el control previo de los presupuestos nacionales de la zona euro y una mayor supervisión de los países con graves dificultades o con un rescate.

Si los ministros de Economía de la UE llegan hoy a un acuerdo sobre el texto legal para crear un supervisor bancario único y empiezan las negociaciones con el Parlamento Europeo, se incluirá también la aprobación de los documentos relevantes para establecer el mecanismo en el seno del Banco Central Europeo (BCE) y cambiar el sistema de votación en la Autoridad Bancaria Europea (ABE).

En este sentido, los líderes prevén acordar antes de marzo de 2013 "un marco operativo", de manera que, cuando se haya establecido un supervisor efectivo, el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) pueda recapitalizar directamente a la banca después de una "decisión regular", según aparece en el borrador.

Los países deberían además acordar, según ese documento, las propuestas sobre la recuperación y resolución bancaria y el fondo de garantías de depósitos y avanzar hacia la aplicación de los nuevos requisitos de capital, si el Ecofin cierra esta propuesta en su reunión de hoy.

La fase dos (2013-2014) se dedicará a completar el marco financiero integrado y a promover el crecimiento y el empleo a nivel nacional.

Tras la creación del supervisor único, la Comisión Europea (CE) presentará durante 2013 una propuesta para crear una autoridad europea para la liquidación de bancos en los países que participarán en el mecanismo de control.

En paralelo se fortalecerá el marco de supervisión macroeconómica mediante una mayor coordinación previa de las grandes proyectos de reformas de los estados miembros basándose en una propuesta que la CE anunciará a lo largo del próximo año.

"Todos los estados miembros deben promover un crecimiento económico fuerte y sostenible, competitividad y empleo", y para lograr este objetivo los países de la zona euro suscribirán "contratos individuales" con las instituciones europeas sobre las medidas y las reformas a las que se comprometen y sobre las vías para implementarlas, señala el proyecto de conclusiones.

Esos contratos, a los que se podrán sumar los países de fuera del euro, se apoyarán en las recomendaciones específicas por países y en el sondeo anual de crecimiento que elabora la CE con sus prioridades para el siguiente ejercicio fiscal.

La CE revelará además en 2013 cómo se puede apoyar la implementación de las reformas.

En la tercera fase, posterior a 2014, la UE creará un instrumento de estabilización común y coordinará más las políticas económicas nacionales, con el objetivo de avanzar progresivamente hacia una puesta en común de la soberanía económica y una mayor solidaridad entre los estados miembros.

"Esto conllevará más tiempo y podría implicar un cambio de los Tratados", admite el borrador.

Los líderes europeos invitarán a la CE a "explorar más la viabilidad y las características operativas" de un presupuesto propio de la zona euro.

Esta tercera fase también prevé una mayor convergencia en la toma de decisiones sobre presupuestos nacionales y una mayor coordinación de políticas económicas, en particular en materia de impuestos y empleo, señala el borrador.

Todas estas medidas implicarán la necesidad de una mayor legitimidad democrática y rendimiento de cuentas ante los parlamentos nacionales y el Parlamento Europeo (PE).

La cooperación entre ambos legislativos podría hacerse en la forma de una "conferencia de representantes de las relevantes comisiones parlamentarias de la Eurocámara con sus contrapartes de los parlamentos nacionales", propone el texto.