La 'hipoteca' de España se encarece un 30% en la primera mitad del año

  • En el primer semestre del año, las incertidumbres del mercado han obligado al Tesoro a elevar los intereses que paga a los inversores para que éstos compren deuda pública. En este tiempo, España ha colocado 98.700 millones en letras, bonos y obligaciones y, para ello, ha tenido que pagar un 28,21% más que en 2010.
El Tesoro coloca más de 5.400 millones en letras pero vuelve a subir el interés
El Tesoro coloca más de 5.400 millones en letras pero vuelve a subir el interés
Ana P. Alarcos

El nerviosismo que ha invadido los mercados en los seis primeros meses del año ha afectado directamente al bolsillo de España S.A. De hecho, a medida que se han ido complicando los acontecimientos internacionales, el Tesoro se ha visto obligado a elevar los intereses que paga a los inversores para que éstos compren deuda pública.

Tanto es así que, a cierre de junio, la hipoteca del Estado se ha encarecido un 28,21%, ya que la media de los intereses marginales que ha pagado por vender deuda ha pasado del 2,831% que marcó en 2010 al 3,63% actual.

Este fuerte repunte se ha producido por el recrudecimiento de la crisis de deuda soberana en Europa, que ha vivido en los últimos meses el rescate de Portugal, el tercero en la eurozona, y un nuevo capítulo de la tormenta soberana griega, que podría recibir un nuevo paquete de ayudas próximamente.

Ha sido este escenario adverso el que ha encarecido los bonos españoles, ya que, cuanta más incertidumbre hay en el mercado, más intereses exigen los inversores por comprarlos. Esto explica por qué España está pagando casi un 30% más que hace seis meses por financiarse en los mercados.

No obstante, el incremento del coste de financiación no ha sido el mismo en la deuda a corto plazo (letras) que en la deuda a largo plazo (bonos y obligaciones). En concreto, el repunte las letras duplica al de los bonos y las obligaciones, lo que viene a subrayar que los temores de los inversores están concentrados en el corto plazo, que comprende un período máximo de año y medio.

Según los datos del Tesoro, España ha pagado un 40% más que el año pasado por colocar letras, que se han adjudicado a un interés marginal del 2,18%, mientras que, en el caso de los bonos y las obligaciones, el incremento ha sido del 19%, hasta alcanzar el 5,07%.

Pero, realmente, ¿en cuánto dinero se traduce esta subida de los intereses? La respuesta es en miles de millones de euros. Según los últimos datos disponibles, la deuda total del Estado cerró abril en 558.445 millones de euros.

Si a esta cantidad se le aplican los intereses de 2010, cuya media fue del 2,83%, resulta que España tendría que pagar 15.810 millones. En cambio, si a esa misma cifra se le aplican los intereses actuales, del 3,63%, la cantidad a pagar se eleva hasta los 20.272 millones. Es decir, unos 4.460 millones de euros más.

Y este plus que deben pagar las arcas públicas puede ir subiendo. De hecho, algunos expertos creen que el coste de financiación puede cerrar el año entre el 4% y el 5%.

Si se cumplen estos pronósticos y los intereses llegan al 4%, la factura al bolsillo español escalaría hasta los 22.338 millones, casi 7.000 millones más de lo que hubiera pagado a cierre de 2010, y 2.100 millones más que con las tasas actuales.

Suma y sigue, porque si el coste de financiación se dispara hasta el 5%, España tendría que pagar 27.922 millones en intereses, casi el doble que con las cifras de 2010 y 7.700 millones más que con las rentabilidades actuales.

Con todo, y a pesar de que lo más probable es que a España se le siga encareciendo el coste de financiación, los intereses están lejos de los alcanzados en años anteriores. En 2007, por ejemplo, el Tesoro pagó una media del 4,13%.

 

Mostrar comentarios