El BCE da un préstamo histórico de medio billón de euros a la banca europea

La cita del día no ha defraudado: ha roto las cifras que han estado manejando los expertos en las últimas horas y ha conseguido escribir una nueva página en la historia.

El Banco Central Europeo (BCE) acaba de anunciar que ha prestado un total de 529.531 millones de euros a los bancos de la eurozona, un récord que supera el dato de la anterior subasta de este perfil que realizó la autoridad monetaria hace apenas dos meses.

En aquella ocasión, fechada el 21 de diciembre, la institución presidida por el italiano Mario Draghi repartió 489.190,75 millones a un tipo fijo del 1% entre 523 entidades, en la que fue su primera subasta de liquidez con vencimiento a tres años.

Pero la inyección de liquidez de hoy ha roto esos esquemas. Y no sólo en volumen, sino también en peticiones: según la agencia de noticias Reuters, hasta 800 bancos de la eurozona han pedido prestado dinero a la autoridad monetaria. Además, será la última que realice en estos niveles.

La misma fuente apunta que esta ayuda multimillonaria se ha pactado a un tipo de interés del 1%, en línea con el registrado en la subasta de diciembre y al mismo nivel que marca hoy en día el precio del dinero en la eurozona.

Las entidades deberán el dinero que han pedido prestado más los intereses antes del 26 de febrero de 2015. Es decir, justo dentro de tres años.

Dónde irá a parar todo este dinero

A pesar de este faraónico préstamo, los expertos creen que la medida no va a conseguir que el crédito fluya a familias y empresas. Al menos, en España.

El principal motivo es que, actualmente, las entidades financieras son muy reticentes ha conceder préstamos y, sobre todo, cuando apenas encuentran demanda solvente para darlos.

Por eso, la ayuda a la banca no tendrá un reflejo directo en la economía real. Sin embargo, sí impactará en el propio sector financiero, que con ese dinero podrá afrontar con tranquilidad su calendario de compromisos financieros (solo el español debe pagar 200.000 millones entre 2012 y 2013), así como la nueva normativa de solvencia y reestructuración.

Además de los propios bancos, quien también sacará provecho de esta inyección histórica será el Tesoro Público, ya que está previsto que las entidades destinen parte de los fondos que han conseguido hoy a la compra de deuda pública.

¿El motivo? Con esta operación hacen negocio: les prestan a un 1% y ellas pueden apostar por bonos u obligaciones (es decir, deuda a medio y largo plazo), que ofrecen rentabilidades muy superiores.