Iberpotash ha generado un impacto económico de 595 millones entre 2011-2013

Manresa (Barcelona), 12 dic.- La empresa minera Iberpotash ha generado en los últimos tres años, entre 2011 y 2013, un impacto económico directo de 595 millones de euros en España y, principalmente, en Cataluña, donde concentra su actividad.

Así se desprende del avance del 'Estudio de impacto socioeconómico de Iberpotash' que ha elaborado la consultora PwC y que se ha presentado hoy en la Cámara de Comercio de Manresa (Barcelona).

Iberpotash, propiedad de la multinacional israelí ICL, a escala estatal, genera más del 12 % de la cifra de negocio de la industria extractiva de minerales no metálicos.

PwC calcula que el valor económico de la compañía distribuido en el último trienio ha aumentado un 41 %, situándose en más de 595 millones, teniendo en cuenta todas las actividades de la firma, tanto extractivas como logísticas, como las compras a proveedores, el pago de impuestos, tasas, licencias, salarios, beneficios a los empleados y otros gastos operativos.

Entre 2011 y 2013, Iberpotash ha duplicado el valor de sus compras hasta alcanzar un volumen total de 340 millones de euros, un 63 % de los cuales corresponden a proveedores catalanes (216 millones).

En su informe, PwC revela también que el sueldo base de los trabajadores de esta compañía minera triplica el salario mínimo interprofesional, situándose en 27.866 euros anuales.

En materia de medio ambiente, el documento indica que los gastos totales de Iberpotash en este campo se han incrementado más de un 43 % en el período de estudio, hasta alcanzar la cifra de 9 millones de euros en el año 2013.

Iberpotash es la única empresa productora de sales potásicas en España, un fertilizante natural básico para la agricultura, y también es un actor importante en el mercado de la sal, dado que la sal es un residuo generado por la potasa.

El pasado mes de noviembre, Iberpotash dio luz verde a la inversión de 280 millones de euros que permitirá desarrollar la segunda fase del Plan Phoenix en Cataluña, un proyecto que estaba 'congelado' desde hace meses por una sentencia contraria del Tribunal Supremo.

Esta inversión se suma a los 170 millones que ya se están invirtiendo en la primera fase del Plan Phoenix, con la construcción de la rampa de acceso a la mina de Cabanasses, la ampliación de las instalaciones industriales en Súria y la construcción de la primera planta de sal vacuum.