Una planta de carbón clave para Ucrania denuncia un constante bombardeo desde Donetsk

    • La factoría, una de las cuatro más grandes de su categoría que existen en todo el mundo, llegó a procesar 12.000 toneladas de carbón al día.
    • Las instalaciones han sufrido más de 200 impactos de proyectiles lanzados desde el DNR desde julio de 2014.
Una trabajadora refresca el carbón en la planta de Metinvest en Avdiivka (Donbass)
Una trabajadora refresca el carbón en la planta de Metinvest en Avdiivka (Donbass)

Partiendo desde la polvorienta plaza de la estación de Kramatorsk en taxi de ocasión, de camino a Zaitsev para el paso de la frontera con la autodenominada República Popular de Donetsk, se encuentra una enorme factoría levantada en tiempos de la URSS, que se dedica al procesamiento de carbón.

La factoría, una de las cuatro más grandes de su categoría que existen en todo el mundo, llegó a procesar 12.000 toneladas de carbón al día, pero actualmente su preocupación no está en lograr más beneficios en su cuenta de resultados anual, sino en evitar que mueran asesinados más trabajadores de su plantilla.

Esta planta de la compañía siderúrgica ucraniana Metinvest no es una instalación cualquiera. Produce más de 30 tipos de carbón para plantas metalúrgicas y para empezar, es propiedad en su mayor parte del oligarca Rinat Akhmetov, nacido en Donetsk precisamente.

En segundo lugar, y no menos importante, la planta se encuentra levantada muy próxima al peligroso límite entre el territorio controlado por Ucrania y el que se encuentra en poder de las nuevas autoridades del DNR.

La planta de Avdiivka se ha convertido en los últimos meses en un campo de tiro para los artilleros del DNR, que han alcanzado con Grad, morteros y obuses de gran capacidad destructora las instalaciones, dejando más de una decena de muertos entre los trabajadores que se afanan entre el polvo del carbón y el fuego de los hornos.

Más de 200 impactos se han registrado en las instalaciones, que nos muestra el subdirector de la planta mientras desgrana un discurso marcado por cierto hastío. Nos explica que la mayoría de trabajadores partidarios de la nueva república de Donetsk abandonaron su puesto, lo que les ha permitido continuar con su trabajo con cierta tranquilidad. Pero aceptan mostrar las entrañas de la planta, una visita inédita, con la única intención de denunciar los ataques que están recibiendo.

En el bloque principal de edificios, de la fachada del área de oficinas de la fábrica no ha quedado en pie ni un cristal. El impacto cercano de un proyectil los hizo saltar por los aires hace escasos días. Mientras visitamos la planta, a primera hora de la mañana, no se recibe ningún ataque, pero esa misma tarde vuelven a sufrir un bombardeo.

Militares ucranianos se encargan ahora de las tareas de seguridad en los accesos a la factoría, que según Metinvest ha visto dañados edificios administrativos, talleres de reparación y mantenimiento de ferrocarriles, dos de las cuatro líneas de electricidad de alta tensión y gran cantidad de equipos técnicos.

En total, las instalaciones han sufrido más de 200 impactos de proyectiles desde julio de 2014. El pasado 4 de agosto tuvieron que paralizar la actividad de la planta, que no lograron reanudar hasta el día 10 del mes, una vez se restableció el flujo de electricidad.

El importante papel de la planta de Avdiivka en toda la industria metalúrgica de Ucrania es el factor que ha convertido en un peligro añadido al trabajo del carbón. Pero mientras llega la prometida paz, o al menos se cumple la prometida tregua acordada en Minsk, la fábrica seguirá siendo un objeto de deseo para las autoridades del DNR, sabedoras de su papel estratégico en la economía 'del enemigo'.

Mostrar comentarios