GM asume su culpa y paga 35 millones por el defecto del sistema de ignición

  • General Motors aceptó hoy pagar una multa récord de 35 millones de dólares a las autoridades estadounidenses por retrasar durante años la llamada a revisión de millones de vehículos defectuosos, una acción que el Departamento del Transporte dijo que "violó la ley".

Washington, 16 may.- General Motors aceptó hoy pagar una multa récord de 35 millones de dólares a las autoridades estadounidenses por retrasar durante años la llamada a revisión de millones de vehículos defectuosos, una acción que el Departamento del Transporte dijo que "violó la ley".

El secretario de Transporte, Anthony Foxx, y el director en funciones de la Administración para la Seguridad en la Carretera (NHTSA), David Friedman, anunciaron el acuerdo durante una rueda de prensa en Washington en la que criticaron las acciones del fabricante de automóviles.

Foxx afirmó que durante años General Motors conoció la existencia del defecto, que permite el apagado inesperado e involuntario del motor y que ha causado al menos trece muertos en Estados Unidos, pero la compañía mantuvo la información oculta.

"Literalmente, el silencio puede matar. Lo que GM hizo fue violar la ley", afirmó el secretario de Transporte.

Por su parte, Friedman dijo en un comunicado que "ninguna excusa, proceso o estructura de organización se interpondrá en el camino de que las compañías cumplan sus obligaciones para hallar rápidamente y arreglar problemas de seguridad en un vehículo".

Es la segunda vez en pocos meses que Foxx convoca una rueda de prensa para anunciar sanciones ejemplares contra fabricantes automovilísticos que han ocultado los defectos que afectan a sus vehículos.

El pasado mes de marzo, Foxx anunció la imposición de una sanción de 1.200 millones de dólares a Toyota por mentir y ocultar graves defectos en sus vehículos en 2009 y 2010.

Además de la "multa civil récord" de 35 millones de dólares, el acuerdo entre las autoridades estadounidenses y GM incluye una serie de requisitos "de supervisión sin precedentes".

GM se comprometió a revelar a NHTSA todos los posibles problemas de seguridad de sus vehículos para lo que mantendrá reuniones mensuales con la agencia encargada de velar por la seguridad en el sector del automóvil en Estados Unidos.

Además, GM tendrá que informar cada dos semanas de la progresión de la llamada a revisión del sistema de ignición y que afecta a 2,6 millones de vehículos.

Las autoridades también advirtieron de que el pago de la multa de 35 millones de dólares no es el último que GM tendrá que efectuar a las autoridades estadounidense por retrasar durante años la llamada a revisión por el defecto que permite el apagado del vehículo cuando está en funcionamiento de forma inesperada e involuntaria.

"Como parte del acuerdo de hoy, establecido en una Orden de Consentimiento firmada con la Administración para la Seguridad en la Carretera (NHTSA), la agencia también ordena a GM hacer cambios internos significativos y amplios de su revisión de problemas relacionados con la seguridad", añadió el Departamento de Transporte.

La consejera delegada de GM, Mary Barra, dijo en un comunicado que su empresa ha "aprendido mucho con esta llamada revisión".

"Ahora nos concentraremos en el objetivo de ser un líder de seguridad en el sector. Saldremos de esta situación como una compañía más fuerte", añadió Barra.

"El objetivo último de GM es crear un proceso ejemplar y producir los vehículos más seguros para nuestros clientes. No se merecen menos", terminó diciendo la máxima ejecutiva de GM.

Precisamente hoy, GM llamó a revisión unos 8.500 vehículos en Norteamérica de los modelos Buick Lacrosse y Chevrolet Malibu para reparar un defecto en los frenos del eje delantero. Según GM, los vehículos afectados fueron producidos con rotores diseñados para ejes traseros, y son menos potentes que los apropiados.

También hoy GM dijo que para octubre habrá producido suficientes piezas como para reparar "la mayoría" de los 2,6 millones de vehículos afectados por la llamada a revisión.

Jeff Boyer, vicepresidente de Seguridad Global de GM, explicó en un comunicado que "dado que el interruptor de ignición tuvo una producción muy limitada durante años, el proveedor de GM, Delphi, ha aumentado la producción, desempolvado maquinaria y encontrado nuevos proveedores para algunos componentes".

"Estamos comprando nueva maquinaria y equipos para producir componentes más rápidamente", añadió. EFEUSA

Mostrar comentarios