Hacienda se harta y forzará el concurso de los clubes de fútbol morosos

  • La Agencia Tributaria está mirando con lupa las cuentas de los equipos, con el objetivo de imponer la suspensión de pagos a aquellos en riesgo de quiebra. Esta decisión supondrá que las actuales directivas de los clubes afectados queden fuera de juego, ya que tomará las riendas el administrador que nombren los juzgados.
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R.Ugalde/A.Medina R.

No va más. El fisco se ha cansado de ver cómo los clubes de fútbol firman contratos multimillonarios mientras dejan de cumplir sus obligaciones con Hacienda y está empezando a trabajar con el objetivo de forzar a los equipos morosos a que vayan a concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos).

Esta decisión, que ha sido confirmada por lainformación.com con fuentes conocedoras de estos trabajos, supone todo un cambio de tercio en la forma de actuar de la Agencia Tributaria, que hasta ahora había preferido negociar e ir cobrando poco a poco la deuda, en vez de tomar una decisión tan drástica.

Pero el negro horizonte que se vislumbra para los equipos, con unas deudas disparadas y unos ingresos a la baja, agravados por la previsible caída de los derechos televisivos, han llevado a Hacienda a cambiar de actitud.

De hecho, hace ya mucho tiempo que tiene embargados los ingresos que los clubes morosos perciben en concepto de traspasos, derechos televisivos y quinielas. Este dinero es gestionado por la Liga de Fútbol Profesional, que directamente ingresa a Hacienda la cantidad que corresponde a los equipos que tienen deudas con el fisco.

Y es que la Agencia Tributaria es el mayor acreedor de gran parte de los clubes de fútbol, como se destapó hace pocas semanas, cuando el Gobierno tuvo que reconocer, ante una pregunta parlamentaria de Izquierda Unida, que la mejor Liga del mundo tiene un agujero de 752 millones de euros con Hacienda.

Esta disparada cifra ha desatado la ira de gran parte de la clase política y de la opinión pública. Para hacerse una idea, esta cifra es más o menos lo que la UEFA reparte al año en derechos televisivos por la Liga de Campeones o casi los presupuestos sumados de Madrid y Barcelona.

Además, tiene el agravante de que los impagos a Hacienda se han disparado un 25% desde 2008, en plena crisis económica; y de que son los equipos que componen la Liga BBVA los más morosos.

En concreto, los clubes de la categoría reina tienen un importe pendiente de 489.930.880,80 euros; los Segunda, de 184.180.499,29 euros, mientras que los equipos a los que se engloba bajo la categoría de No quinielas deben a Hacienda 78.185.978,49 euros.

Suma y sigue, porque estas deudas son sólo la punta del iceberg, ya que los equipos también tienen multimillonarias cuentas pendientes con la Seguriad Social, lo que dispara el agujero real del fútbol con la Administración General del Estado.

Para colmo de males, sus opciones de devolver estos compromisos serán cada vez menores, debido a que las famélicas cuentas públicas y los duros planes de ajuste dejarán para el olvido las disparadas pujas que se han visto hasta ahora por la Liga.

Además, las dos grandes cadenas privadas, Antena 3 y Telecinco, han dejado claro que sólo están dispuestas a pagar cifras que permitan rentabilizar esta inversión, lo que puede traducirse en un recorte del 50% de los ingresos que perciben actualmente.

Una amenaza que ya está sobre la mesa, ya que en apenas dos meses, cuando concluya la Liga, se terminan los derechos de La Sexta y Mediapro necesita encontrar una nueva cadena para emitir los partidos de la próxima temporada. Un paquete que, según las fuentes consultadas, le costaron 50 millones de euros, cifra que Antena 3 y Telecinco aseguran no estar dispuestas a pagar.

También para cuando termine esta temporada se aclarará qué ocurre con los equipos que mantienen impagos (ya sea con sus jugadores o con algún otro acreedor). Los estatutos de la LFP recogen la posibilidad de perder la categoría por razones económicas. Hasta ahora no la ha aplicado, pero el clamor social crece.

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