Guerra abierta entre WhatsApps

    • WhatsApp cada vez tiene más competidores directos: a la puesta en marcha de Joyn, Mitmi, Spotbros o Tu Me, se ha sumado recientemente la llegada de Line.
    • En medio de esta guerra de aplicaciones, el líder del mercado se ha visto envuelto en un bulo que le acusaba de empezar a cobrar por su servicios. ¿Coincidencia?
Google podría comprar WhatsApp
Google podría comprar WhatsApp
A.P.A.

WhatsApp, el famoso servicio gratuito de mensajería instantánea, ha conseguido enganchar a millones de personas en todo el mundo y, con ello, abrir un nuevo capítulo en la era de la telefonía móvil.

El éxito de la aplicación, sumado a las posibles mejoras del servicio, parecen haber animado a sus competidores a unirse a la moda de la mensajería instantánea en internet, e intentar hacerse un hueco en este jugoso mercado.

En medio de esta guerra de aplicaciones, el líder del mercado ha comenzado a cobrar por la aplicación, algo nada sorprendente ya que siempre se dijo que el uso gratuito se limitaba exclusivamente a un año.

Sea como sea, lo cierto es que este mercado ofrece cada más alternativas y conviene conocer todas las que funcionan en España.

Hasta ahora, parecía que el gran rival de WhatsApp iba a ser Joyn, la aplicación de los grandes operadores móviles. Este servicio, que llevaba algunos meses en pruebas, vivió ayer su puesta de largo con el lanzamiento conjunto de Vodafone, Telefónica y Orange. Además, se espera que Yoigo se una a esta iniciativa en 2014.

Inicialmente, está disponible para Android, y la versión para el iPhone se lanzará más adelante. Los usuarios pueden bajarse Joyn en las tiendas de aplicaciones y pronto podrán adquirir dispositivos con la aplicación integrada. Entre las características que ofrece se incluye una agenda avanzada que identifica los contactos, un chat multimedia y llamadas con imágenes o vídeo en directo.

Pero esta alianza apenas es la punta del icerberg. Y es que ni siquiera sus socios se han conformado con este servicio.

Telefónica lanzó el pasado mayo Tu Me, una aplicación algo diferente, ya que permite, además de intercambiar mensajes, realizar llamadas. De ahí que sea una mezcla entre WhatsApp y Skype.

No obstante, este servicio es exclusivo de la operadora presidida por César Alierta, lo que significa que los usuarios solo se podrán comunicar con otros que tengan esta aplicación y sean clientes de la compañía.

Pero la competencia no sólo está llegando de la mano de los grandes. Cada vez más emprendedores están encontrado en este sistema de mensajería instantanea una oportunidad de negocio.

Mitmi es un ejemplo de ello. Este programa de origen español, que nació a principios de año, ha llegado al mercado con una idea clara: la creación de eventos (como planes con amigos) desde el móvil, lo que no puede hacerse con las apps móviles de Facebook o Tuenti.

Además, permite hacer reservas en más de 5.000 restaurantes en España y en las principales ciudades europeas; todo ello gracias a la integración del sistema de reservas de Restalo.es.

Otro caso es el de Spotbros, la aplicación que permite encriptar los mensajes y evitar que sean interceptados. Esta posibilidad le ha permitido ganarse el apodo del WhatsApp para montar revoluciones, como la del 15-M.

Esta aplicación, que está disponible para Android e iOS, terminó con su periodo de pruebas el pasado octubre y ya es una rival en firme de WhatsApp, como demuestra el hecho de que ya cuente con casi 550.000 descargas.

También ha irrumpido con fuerza en el mercado Line, aplicación japonesa que nació en 2011, cuando el terrible tsunami que arrasó el pais dejó sin comunicaciones a la población.

Su éxito en esta dramática situación es su mejor carta de presentación y le ha llevado contar ya con 75 millones de usuarios activos en todo el mundo. España y el resto de países hispanohablantes se están sumando en masa.

Pero, además de estas iniciativas, están los propios chats que incluyen los fabricantes en sus terminales, como el iMessage de Apple o el ChatOn de Samsung. Todo apunta a que surgirán nuevas batallas entre los WhatsApp. Pero, ¿quién terminará ganando la guerra?

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