Bankia podría pedir su rescate en julio y el resto de bancos públicos venderse a privados

Toda regla tiene excepciones y, en el caso del rescate bancario español, éstas son las cuatro entidades nacionalizadas, es decir, Bankia, Novacaixagalicia, Catalunya Caixa y Banco de Valencia. ¿Por qué son diferentes? Porque no están obligadas a esperar hasta septiembre para pedir ayuda a Bruselas.

Según explicó ayer el secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, estas entidades pueden solicitar el dinero que necesiten desde el mismo momento en que esté activada la línea de crédito por importe de hasta 100.000 millones que va a aprobar Bruselas.

La razón es que ya están siendo gestionadas por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), y por tanto, se sobreentiende que el Gobierno conoce al detalle todas sus necesidades, sin necesidad de esperar a las dos auditorías que van a realizar Deloitte, KPMG, E&Y y PWC.

De hecho, fuentes del Ministerio de Economía han confirmado a lainformacion.com que, en principio, se mantiene la hoja de ruta diseñada para Bankia y su matriz, Banco Financiero y de Ahorros (BFA).

Ésta contempla que en julio se lleve a cabo la ampliación de capital a través de la cual el Estado se hará con las dos entidades, previo desembolso de 19.000 millones, un dinero que deberá pedir a Bruselas.

Donde hay más dudas en el sector es en la cifra que terminará recibiendo la entidad, sobre todo, después de que la horquilla que han dado las consultoras Oliver Wyman y Roland Berger sobre las necesidades de capital de todo el sistema financiero español contempla una horquilla mínima que oscila entre 16.000 y 25.000 millones.

Éste es el dinero que, según estas consultoras, necesitarían todos los bancos españoles en un escenario de recesión similar al actual, cifra difícil de encajar cuando se recuerda que Goldman Sachs y el Ministerio de Economía concluyeron que sólo Bankia necesita 19.000 millones.

En cambio, la horquilla más alta del análisis de Oliver Wyman y Roland Berger dispara hasta 62.000 millones la inyección a todo el sector. Fuentes de Economía aseguran que las cuatro entidades nacionalizadas absorberán dos tercios de toda la ayuda que termine pidiéndose, lo que equivale a 40.000 millones si se toma como buena esta segunda referencia.

Se da la circunstancia de que siempre se ha hablado de que ésta es la cantidad que necesitarán las cajas intervenidas: 19.000 millones para Bankia, unos 9.000 millones para CatalunyaCaixa y otros tantos para Novacaixagalicia; mientras que el rescate de Banco de Valencia será muy inferior.

Además, en el caso de estas tres últimas, estas inyecciones serán su principal atractivo para las subastas que prevé llevar a cabo con ellas del Banco de España dentro de un tiempo.

Se retrasan las subastas

En el caso de Banco de Valencia y Catalunya Caixa, estaba previsto que sus ventas se cerrarán en las próximas semanas. Pero el FROB, que es quien las está administrando desde que fueron nacionalizadas, ha decidido retrasarlas hasta que sean saneadas con el dinero que pidan a Bruselas, ejercicio que, como Bankia, pueden empezar a hacer en julio.

De hecho, ante la falta de dinero del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), fuente con la que se han financiado hasta ahora todas las subastas, la venta de estas entidades a otros grupos se realizará con la ayuda europea.

El Gobierno ha dejado claro que resulta más barato sanear entidades que liquidarlas, por eso, su objetivo con las entidades intervenidas es limpiarlas con el dinero de Bruselas y venderlas posteriormente a otros grupos.

Por el camino, no se descarta crear un banco malo con los activos tóxicos de estas sociedades, de manera que los compradoras se queden sólo con la actividad sana.

En el caso de Novacaixagalicia, desde siempre ha contado con septiembre como mes límite para encontrar una solución por sí misma, es decir, para encontrar socios privados que rescaten la entidad. Si no lo consigue, entonces el FROB hará el saneamiento con el dinero del rescate europeo y, posteriormente, la subastará también.