"Si el petróleo se va a 200 dólares, impactará en la gasolina. Pero Dios quiera que no sea así, porque entonces el verdadero conflicto será otro". Con esta lapidante frase, el presidente de la petrolera Repsol YPF, Antonio Brufau, ha puesto blanco sobre negro la situación que se vive en África y Oriente Medio.
La alta tensión desatada por la crisis en Libia ha disparado hoy el precio del barril de petróleo brent, el de referencia en Europa, hasta un máximo de 120 dólares, frente a los 102 a los que terminó la semana pasada.
Por su parte, el west texas estadounidense han alcanzado un nivel más alto de 103,4 dólares con ganancias que superan el 5%. Este fortísimo avance ha sembrado el temor entre los inversores, que temen que esta subida lastre la recuperación.
El mercado ha reaccionado con una violencia que no se dejó ver en absoluto en las crisis de Egipto y Túnez. El valor estratégico de Libia como productor sí tiene un impacto significativo, aunque el gran temor es que la inestabilidad y las revueltas se extiendan a otras naciones.
De hecho, el verdadero problema que está descontando el mercado con la subida del crudo es la posibilidad de más conflictos bélicos en la región, la más conflictiva del mundo.
Según las estimaciones de Brufau, si la tensión en Libia remite y el conflicto se resuelve en breve, el crudo debería volver a una horquilla de entre 80 y 90 dólares barril. En cambio, si el ámbiente bélico continúa y se extiende a otros países, nadie quiere imaginar las consecuencias.
Repsol, que tiene más del 3% de su producción en Libia y un 5% de sus reservas, estima que todo el norte de África produce unos 3 millones de barriales al día.
La OPEP ya ha anunciado que tiene capacidad para sacar al mercado 5 millones de barriles, por tanto, los disturbios actuales no tienen por qué impactar en exceso sobre el precio del crudo.
Este anuncio ha relajado ligeramente a los mercados y, a media mañana, la cotización del barril de brent ha bajado a 115 dólares; mientras que el West Texas se ha situado en 100,9 dólares, frente a los 103 de esta mañana.
En cambio, si estas mismas revueltas se producen en algún gran país productor, sobre todo en Arabia Saudí, o si la zona cae víctima de una situación bélica, el oro negro podría dispararse.
Impacto de Libia
Los analistas empiezan a calcular el impacto de los disturbios en Libia. Según Reuters, la producción de petróleo de Libia ha caído hasta un 25% debido a los disturbios.
Hoy, el grupo austriaco JBC las diversas estimaciones sobre el volumen de crudo afectado por los cortes de producción en Libia fluctúan entre 400.000 y 1.000.000 de barriles al día.
Repsol, por su parte, ha reducido la producción a la mitad, desde los 3600.000 barriles día anteriores al conflicto, hasta 160.000 barriles.
Los analistas de KBC Energy Economics, con sede Londres, calculan que al menos "un 22% de los 1,58 millones de barriles diarios que produjo Libia en enero" ha dejado de producirse, aunque también insisten en que la cantidad afectada podría ser mucho mayor.
Los analistas muestran su preocupación esta mañana. Oddo Securities dice que, de momento, prefiere no hablar aún de "shock petrolero". Sin embargo sí dice que este escenario podría producirse a partir de los 140 dólares por barril.Y también advierte la firma de valores que las tensiones se están trasladando al precio de otras materias primas, como el algodón.
Por su parte, Renta 4 recuerda que la subida del crudo "aumenta los temores a presiones inflacionistas y por tanto a posibles endurecimientos monetarios" y advierte que el euro sigue muy fuerte, por encima de los 1,37 frente al dólar.
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