La aerolínea Latam canceló para esta jornada 63 vuelos domésticos pero mantenía en operación todos los vuelos internacionales programados para este viernes, afirmó la compañía.
Otras líneas aéreas también debieron ajustar sus operaciones para esta jornada, mientras que las autoridades pusieron en marcha un plan de contingencia para hacer frente a la paralización de los funcionarios de la DGAC, de la que se excluyeron los controladores aéreos.
El plan permitía que "el aeropuerto esté funcionando con normalidad, con todos sus servicios aeronáuticos", según aseguró la mañana de este viernes Juan Luis Rodríguez, jefe del aeropuerto de Santiago.
El paro causó similares desórdenes el jueves, en la primera jornada del paro de la Aeronáutica Civil, que incluía a unos 3.000 funcionarios.
Los trabajadores de la Aeronáutica Civil, que el 15 de septiembre realizaron un primer paro que impidió toda entrada y salida de aviones de los aeropuertos chilenos, demandan mejoras en su régimen de previsión social.
Su mayor aspiración es ser excluidos de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), a las que están obligados a adherir todos los trabajadores dependientes de Chile. En su reemplazo, piden ser incluidos en un sistema de jubilación para las Fuerzas Armadas.
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