Una aerolínea de Singapur se suma a las empresas con zonas "libres de niños"

Si bien los más pequeños de la casa son fuente de alegría y llenan de amor a sus familias, en los últimos años se ha instalado una nueva tendencia 'anti-niños' en el sector del ocio y turismo a lo largo del planeta. No hay nada en contra de los niños, por supuesto, pero sí existe la intención de garantizar espacios de tranquilidad a aquellos que viajan bien por gusto o bien por trabajo.

A los hoteles sin niños, donde el "sólo adultos" da prioridad al descanso y la exclusividad para sus huéspedes, se suma el espacio reservado tanto en restaurantes como en aerolíneas.

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Como ya hiciera la aerolínea Malaysian Airlines, que negó durante mucho tiempo el acceso de niños a primera clase e introdujo una zona sólo de adultos en 2012, la última compañía sumarse a la tendencia "libre de niños" ha sido Scoot, aerolínea pertenecienta a Singapure Airlines.

Esta aerolínea de bajo coste ha separado una cabina con 41 asientos y la ha denominado como su zona del silencio. Pero nada es gratis. Por un extra de 14 dólares al billete, el cliente puede acceder a esta zona exclusiva donde, además de paz y tranquilidad, se ofrece espacio extra para las piernas y asientos más amplios que los de un billete en clase turista, según indica AbcNews.

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Y es que, en lo que se refiere a la tranquilidad a la hora de despegar, la compañía tiene la última palabra. Una pataleta, aunque tengas dos años, no va a librar a los padres de ser expulsados del avión si el piloto así lo decide. Esto le ocurrió a una familia estadounidense cuando tras un rato intentando calmar a su hija antes del despegue, les pidieron que abandonaran la nave de la aerolínea JetBlue por no seguir las órdenes de la tripulación y poner en peligro la seguridad del vuelo.