Borrón y cuenta nueva. Así es como encaraba el Ibex 35 la última jornada de la semana. Con una inyección extra de energía procedente de los resultados positivos en Wall Street y el mercado asiático, que le llevaba a repuntar un 1,1% en los primeros minutos de actividad en el mercado.
El principal indicador de la bolsa española pasaba la página tras la caída de ayer. Con un 1,66% negativo, el Ibex se convertía en el peor indicador del Viejo Continente, salpicado de lleno por la incertidumbre sobre el plan de rescate a Grecia que propone la Unión Europea. Sin embargo, la falta de detalles en la operación volvió a desatar la desconfianza de los inversores.
A pesar de ello, el Ibex levantaba la cabeza e intentaba pasar el mal trago, al igual que los principales mercados europeos, que también sumaban puntos. El Daxalemán amanecía con una subida del 0,7%, el Cac francés repuntaba un 0,8%, mientras que el FTSE británico crecía un 0,6%.
A pesar de que el indicador español comenzaba la sesión con todos sus valores en verde, algunas cotizadas se han dado media vuelta y han empezado a acumular pérdidas. Dos horas después de la apertura de mercado, el indicador español caía casi medio punto porcentual, pérdidas que mantenía a mediodía y también a las 14.00 horas, cuando se dejaba un 0,65%. El sector financiero era el que se estaba llevando las mayores caídas. Banesto perdía casi un 4%, Santander un 1,5% , BBVA un 0,8%, Banco Popular un 0,9%,
Europa seguía el comportamiento español y las pérdidas llegaban a los mercados, menos al Dax, que mantenía las ganancias. Se invertían las tornas: esta mañana Francia y Alemania publicaban los datos de PIB: Alemania se estanca mientras Francia acelera, pero el mercado ha olvidado el dato y no lo ha tomado, para nada, de referencia. Y las cosas no han hecho más que empeorar. A poco más de una hora de que cierre el mercado, el Ibex 35 se dejaba un 1%, mientras que el resto de indicadores europeos acumulaban menos pérdidas. El Cac se dejaba un 0,76%, el Dax un 0,46% y el Ftse 100 un 0,6%. Sin embargo, el indicador portugués -PSI- sigue los mismos pasos que su mercado vecino: retrocede un 1,53%.
Pero se ha juntado el hambre con las ganas de comer porque Wall Street también se teñía de rojo. El mal dato de la confianza de los consumidores en Estados Unidos ha influído en la bolsa de Nueva York. Los analistas esperaban que el dato se situara en torno a los 75 puntos, desde los 74,4 puntos registrados en enero. Pero la cifra ha caído hasta el 73,7 puntos. Aunque salía otro dato, el de las ventas minoristas en Estados Unidos, y esta vez era positivo, Wall Street ha hecho oídos sordos.
De nuevo el sector bancario estaba siendo el más castigado en la jornada de hoy. Y es que esta mañana venían muy malas noticias desde China: el Banco Central chino (BPC) ha vuelto a elevar los requerimientos de reservas de la banca en su país, por segunda vez en menos de un mes. Elevará en medio punto la tasa de capitalización de los bancos del país a partir del 25 de febrero. La banca española perdía posiciones, pero en general, toda la europea también sentía el nuevo revés del país asiático.
En Londres, Lloyd's caía un 3,5%, Royal Bank of Scotland un 2,4% y Barclays un 2,18%. En París, Societe Generale se dejaba más de un 3%, mientras que BNP Paribas perdía un 2,19% y Credit Agricole un 2,65%. En Francfort, Deutsche Bank cedía casi un 2%, mientras que Commerzbank retrocede un 1,34%. En Madrid, mientras tanto, Banesto se dejaba un 3,6%, Bankinter un 2%, Popular un 1,4%, Santander un 1,7%, BBVA un 0,77%, igual que Sabadell. Pero el índice más atacado por el anuncio chino es, sin duda, Wall Street.
Las pérdidas se han ido manteniendo y, al final, el Ibex 35 cierra la semana con un retroceso del 0,55%, hasta los 10.224 puntos. En la última semana, el Ibex ha recuperado un 1,2%, aunque en lo que llevamos de año se ha dejado el 14,37% de su valor. A pesar de que ha sido una jornada muy plana y casi sin sobresaltos, el mercado de valores español no encuentra el impulso necesario para dejar las pérdidas a un lado, echar tierra de por medio, y volver a acumular ganancias. A pesar de que algunos de los grandes valores han cerrado en positivo, comoInditex (+1,01%), los dos grandes bancos, Repsol YPF y Telefónica han cerrado en rojo. BBVAse ha dejado 0,3%, Santanderun 1,58%,Repsol un 0,18% y Telefónica un 0,15%. Iberdrola ha cerrado plano.
La banca ha sido la gran perdedora de la jornada de hoy.Banesto caía un 3,27%, Bankinter un 2,30%, Popular un 1,30% y Sabadell un 0,51%. OHL es la cotizada que más ha caído con un -4,28%, mientras que REEse sitúa en polo opuesto. Es el valor que más ha subido (2,06%).
El mercado contínuo también ha acabado la sesión en rojo, con un retroceso del 0,47%, a pesar de rebotes como el de Aisa,que hoy ha visto interrumpida su cotización, o Inmobiliaria del Sur, que se han disparado un 8,77% y un 7% respectivamente. Imaginarium y San José, dos de las tres últimas compañías que han saltado al parqué, han retrocedido más de un 5%.
En los mercados europeos tampoco se han extendido las compras. El Dax alemán ha caído un 0,59%, el CAC francés un 0,49% y el FTSE británico un 0,37%. Sin embargo, el PSI portugués no nos ha ganado la partida y se ha coronado como el peor indicador de todo el Viejo Continente, tras caer un 1,05%. Pero Wall Street sigue sufriendo y aún le queda mucha jornada por delante. ElNasdaq 100 pierde un 0,47%, el Nasdaq Composite un 0,53%, el S&P 500un 0,97% y elDow Jones industrialun 1,04%.
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