Los hosteleros cierran una Semana Santa lluviosa con un 30% menos de ingresos

Los establecimientos de hostelería, bares y restaurantes de la ciudad de Sevilla cierran la Semana Santa de 2012 con unas estimaciones de ingresos en torno a un 30 por ciento menores a las esperadas por el sector para este período vacacional, un descenso que achacan a las precipitaciones registradas en la mayor parte de los días clave de esta semana.

Los hosteleros sevillanos arrancaban la Semana Santa con "expectativas" e "ilusión" de que las previsiones meteorológicas, que alertaban de inestabilidad durante toda la semana, no se cumplieran y el buen tiempo animase a las procesiones, y por ende al público, a salir a la calle.

No obstante, el presidente de la Asociación Provincial de Hostelería de Sevilla, Pedro Sánchez Cuerda, ha manifestado a Europa Press que "desgraciadamente, se han cumplido las previsiones más negativas", por lo que los objetivos de venta marcados a principio de semana se han visto reducidos "en torno a un 30 por ciento", siendo los bares y restaurantes ubicados en el casco histórico los que más han notado el descenso.

De este modo, Sánchez Cuerda ha indicado que, a medida que han ido avanzando los días, se han ido esfumando las esperanzas de que la Semana Santa, inicio de la temporada alta para los establecimientos hosteleros, dieran un vuelco a la tendencia a la baja que registran desde principios de año. Así, pese a que la Semana Santa de 2011 --marcada también por las precipitaciones-- fue "bastante mala" para el sector en ventas, estiman que las de este año han sido "aún peores".

El presidente de la Asociación de Hostelería ha puesto de manifiesto que, si bien los bares siguen estando igual de llenos, el gasto por cliente se ha visto considerablemente reducido desde el inicio de la crisis, lo que propicia el éxito de los establecimientos que ofrecen precios más asequibles y que los "restaurantes de mantel" apuesten cada vez más por la tapa.